La jueza del juzgado de instrucción nº 8 de Llíria, Ana Magraner Maya, que ha tomado declaración a Rafa Mir ha decidido dejarle en libertad tras ser acusado de un presunto delito de agresión sexual. El futbolista cedido en el Valencia por el Sevilla, ha pasado dos noches detenido desde el lunes a última hora, cuando se produjo su arresto. Su abogado, Jaime Campaner, ha declarado ante los medios a la salida del juzgado que el futbolista queda libre. Además, el letrado ha asegurado que a partir de ahora "vamos a trabajar en el proceso", sin querer hacer más declaraciones.
En la mañana de este miércoles 4 de septiembre, el futbolista ha sido trasladado de dependencias policiales al juzgado para que le fuera tomada declaración por el juez. El primero en llegar a los juzgados de Llíria sobre las 9:15 horas ha sido su abogado, Jaime Campaner, que ha respondido de forma escueta y cuidadosa a las preguntas de los medios de comunicación allí presentes. Ha expresado que "sin duda" las relaciones fueron consentidas y ha asegurado que duda que hablen durante la mañana. "Las declaraciones en el juzgado". Sobre la posibilidad de que quede libre hoy, "desconozco detalles". Y es que dice "todavía no" haber hablado con él y "no" conocer "el expediente".
El jugador del Valencia CF ha declarado este miércoles después de que la Guardia Civil le detuviese la noche del lunes. Fue denunciado, junto a otra persona, por una joven de 25 años, que les acusa de haberla agredido sexualmente en el domicilio del jugador. En los juzgados de Llíria, en los que ya se encuentra, tiene la oportunidad de dar su versión de los hechos.
Los hechos reflejados en la denuncia corresponden a la noche del sábado, cuando habría acudido a una conocida discoteca de Valencia tras el empate ante el Villarreal CF. La presunta agresión sexual habría ocurrido en su casa, más tarde, que se sitúa en Torre en Conill, una urbanización perteneciente al municipio de Bétera. Éste es el motivo por el que declara en Llíria y no en Valencia.
La mujer acudió el domingo a las autoridades policiales para denunciar el presunto delito con penetración, después de ir al hospital y presentar el parte médico de lesiones. Con la puesta en libertad con cargos para Rafa Mir, al jugador se le presenta un horizonte incierto que podría acabar en un juicio penal.
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