No hay caso ni futuro con Foulquier

Dimitri Foulquier atraviesa uno de sus mejores momentos desde que firmó con el Valencia CF en el verano de 2021. El bravo y tosco lateral derecho lo está jugando todo. La lesión de Thierry y el ostracismo de Max Aarons le han convertido en un imprescindible para Rubén Baraja antes y para Carlos Corberán ahora. 1728 minutos en 26 partidos es una tarjeta de presentación impecable para el más veterano del equipo. El lateral derecho, que esta temporada no se ha perdido ningún partido por lesión y que cumple 32 años a final de mes, acaba contrato y, sobre la mesa, no tiene ninguna oferta de renovación. 

Ser el quinto jugador de campo con más minutos jugados esta temporada no le ha valido para mejorar su estatus. En cambio su veteranía y su contrato, que es de los 'antiguos' y se considera elevado para un Valencia CF económicamente empequeñecido juegan en su contra. Por eso, en el club no se plantean negociar ahora una ampliación del mismo. ¿Está Foulquier sentenciado? Pues salvo giro radical de la situación, parece que el lateral derecho no seguirá a partir del próximo mes de junio.

En ese sentido, es libre para firmar con quien quiera desde enero. Precisamente en el mercado de fichajes pasado su nombre fue relacionado con el Getafe y, aunque el Valencia CF no lo renueve a partir de verano no quiere decir que estuviera dispuesto a prescindir de Foulquier ahora.

Es el quinto jugador de campo con más minutos jugados esta temporada

En caso de renovación en verano sería una oferta a la baja. Su ficha está alrededor de 1.5 brutos al año, una cantidad elevada para el que, en teoría será lateral suplente cuando regrese Thierry Rendall tras su lesión. En ese escenario, cualquier gestor de personal o director deportivo sabe que no es buena idea intentar hacer un fichaje a la baja. Es por ello que, salvo sorpresa mayúscula, Foulquier está viviendo sus últimos encuentros como jugador valencianista.

Oferta a la baja por Foulquier, si es que llega

Lo cierto es que, la lesión de Thierry truncó todos los planes. Quizá si el portugués hubiera tenido continuidad, ahora nadie echaría en falta que hubiera caso Foulquier porque no habría jugado apenas. Por el contrario, la llegada de Max Aarons tampoco ha variado su estatus. Foulquier sigue jugando, el inglés ni la huele. Pero ni por esas, la decisión respecto al francés tampoco ha variado. También hay que tener en cuenta que, mientras el equipo no esté salvado, tampoco habrá demasiados movimientos de futuro.