El punto final de la peregrinación
del fútbol en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro es 'el templo
mayor', el estadio Maracaná, y los seleccionadores de Brasil,
Honduras, Nigeria y Alemania saben que para cumplir la travesía sus
jugadores necesitan tener este miércoles "un buen día".
"A cada partido de Brasil es un nuevo momento, son nuevas
emociones. Una victoria calma, pero con una derrota las críticas
aparecen. Espero que estemos en un buen día para seguir adelante con
nuestro objetivo, que es ganar la medalla de oro", dijo el técnico
Rogério Micale a propósito del partido contra Honduras.
Su colega Jorge Luis Pinto admitió que ha metido en la cabeza de
sus jóvenes jugadores lo que nunca pudo pasar por la de los
brasileños antes del partido del Mundial de 2014 que Alemania ganó a
la Canarinha por 1-7 en semifinales.
Honduras, que cumple en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro la
mejor campaña de su historia, accedió a las semifinales al vencer
por 0-1 a Corea del Sur.
"Todo puede pasar", advirtió Pinto, quien abrazado a la historia
recordó también 'el Maracanazo' e incluso la eliminación de Brasil a
manos de Honduras en la Copa América de Colombia jugada en 2001.
"En un deporte en el que se gana, se empata o se pierde, cada uno
está en el derecho de ganar y soñar", concedió Micale, cuyos pupilos
eliminaron en cuartos de final a Colombia con un gol de Neymar, el
primero que firma en el torneo, y otro de Luan.
Brasileños y hondureños se citarán en cuartos de final en el
estadio Maracaná, que a la vez será el escenario de la final del
fútbol en los Juegos Olímpicos.
Una selección femenina se coronará allí el viernes para ocupar el
trono vacante de Estados Unidos y un día después será el turno de la
masculina que busca un oro como el que en Londres 2012 ganó México.
Sao Paulo será el mismo miércoles el escenario de la otra
semifinal entre Nigeria y Alemania.
Jugar en el estadio Maracaná ha sido la mejor motivación que
Pinto ha encontrado para templar los espíritus de los jóvenes
jugadores hondureños, casi todos vinculados con clubes locales.
"Respetamos profundamente a Brasil pero las camisetas ya no
asustan, en los estadios pueden gritar pero los hinchas no juegan.
Por eso creemos que podemos hacer un partido lindísimo", expresó.
A pesar de brasileños, tan solo Neymar puede presumir de ser el
jugador que estuvo la última vez que una selección Canarinha jugó en
el estadio Maracaná.
Este miércoles se cumplirán 1.144 días de la última vez.
Fue el 30 de junio de 2013 durante la final de la Copa
Confederaciones que los locales ganaron por 3-0 a España.
Fred brilló con un doblete a los 2 y 47 minutos, Neymar aportó el
suyo a los 44 de un partido en el que Sergio Ramos desperdició un
penalti y Gerard Piqué resultó expulsado.
Nigeria avanzó a las semifinales tras derrotar por 2-0 a
Dinamarca en tanto que Alemania dio una muestra más de su poderío
ofensivo al vapulear por 0-4 a Portugal.
Las selecciones perdedoras jugarán por la medalla de bronce en el
estadio Mineirao de Belo Horizonte el mismo 20 de agosto, horas
antes de la final por el oro en el Maracaná.
- Partidos de las semifinales:
Brasil - Honduras (13.00 en Río de Janeiro)
Nigeria - Alemania (16.00 en Sao Paulo).
(Hora local. +5 CET. +3 GMT).