Carolina Robles, el debut en los Juegos Olímpicos del orgullo de Montequinto
Tras años de trabajo, a Carolina Robles le llegó la oportunidad de demostrar su talento ante el mundo. La corredora sevillana debutará este domingo 1 de agosto en los Juegos Olímpicos, el que será el primer torneo internacional de su carrera, o lo que es lo mismo, empezar por todo lo alto.
Antes de volar a Tokio, atendió a ElDesmarque para hablar del sueño olímpico y acercarnos al pequeño mundo de los 3.000 metros con obstáculos dentro del gran mundo del atletismo.
Nacida en Montequinto, un municipio de más de 30.000 personas perteneciente a Dos Hermanas, Carolina vivirá sus primeros Juegos en la capital de Japón con la ilusión, nos cuenta, de colarse en la final.
En las series clasificatorias habrá una dura pelea entre las corredoras europeas, puesto que las keniatas, etíopes y estadounidenses, entre otras, están a otro nivel. Una experiencia, la olímpica, que afronta con, por qué no, las ganas de poder hacerse una foto con algunas de sus referentes en su modalidad.
En Tokio llevará los colores rojo y gualda de la bandera de España con mucho orgullo, pero también asegura que sentirá que representa al mundo del atletismo tanto en Andalucía como en Sevilla. Precisamente en su ciudad se ha convertido en una figura vital para el reflote del deporte abriendo una escuela de atletismo (Correcaminos) que empezó poco a poco y ya tiene listas de espera.
El momento más duro para Carolina Robles
No fue ella, pero como si lo fuera. Irene Sánchez se rompió a pocos días de volar al país nipón. Se trata de su compañera en los 3.000 metros con obstáculos, con la que iba a formar pareja como únicas representantes de la modalidad para España.
Estaban entrenando juntas e Irene se paró en seco cuando se lesionó. Carolina tuvo que seguir la serie de entrenamiento con la mayor preocupación del mundo. Cuando terminó se acercó para preocuparse, pero su cara lo decía todo.
