Ana Peleteiro es un ejemplo, tanto si gana como si pierde. La atleta gallega se despidió de los Juegos Olímpicos de París 2024 sin medalla, pero con el orgullo de haber trabajado de una manera espectacular para llegar a esta gran cita después de ser mamá. Unos Juegos a los que llegaba con altas posibilidades de medalla y consiguió clasificarse para la final de triple salto al primer intento. En la fase definitiva no acompañó el clima, con una lluvia que encharcó todo el carril de aceleración y pudo empañar el nivel de Ana para dejarla en sexta posición. Aunque para ella no hay ninguna excusa.
"Os mentiría si os dijera que estoy contenta con el resultado de ayer porque no es cierto, pero también os mentiría si no os dijera lo orgullosa que estoy del camino que he recorrido en los últimos 19 meses", comentó Peleteiro a través de sus redes sociales.
"Ha sido muy duro llegar hasta aquí por eso mismo tengo que estar orgullosa de mí, de mi equipo y de todos los que habéis creído en este sueño. El deporte a veces es así, pero yo creo que todo pasa por algo, y estoy segura de que saldré más fuerte y guerrera que nunca. La vida sigue y el deporte también. De hecho, hoy ya me he sacado el billete directo para el mundial de Tokio 2025 así que ya tengo un nuevo objetivo en la mente que perseguir. Gracias a todos por los miles de mensajes que me habéis mandado, sois increíbles. De aquí saldré mejor deportista, pero sobre todo mejor persona".
El que mejor sabe el trabajo que conlleva unas Olimpiadas es Benjamin Compaoré. El marido de Ana Peleteiro sabe de primera mano todo lo que lleva detrás la gallega desde que fue madre hace muy poco. Él y su hija Lúa son sus mayores apoyos y en París salió a competir con el nombre de su pareja junto al suyo ‘Peleteiro-Compaoré’. Justo después de realizar su último salto, Ana y Benjamin se fundieron en un emotivo abrazo lleno de sentimiento.
“Juntos creamos lo más bello que existe, y esta noche lucharás por ganar la medalla más bella”, escribió en sus redes sociales el atleta francés para dar ánimos a Ana. “Pase lo que pase, estoy increíblemente orgulloso de ti por lo que eres, por todo el amor que me brindas, día tras día. Lùa y toda nuestra familia están contigo. Te amo amor”.