Aquí hay defensa

Una de las pocas notas positivas que dejó el empate del Atlético de Madrid en Brujas fue el gran partido de Montero atrás. El zaguero cumplió al lado de Godín uno de sus mejores choques con el primer equipo y demostró que esta capacitado de sobra para convertirse en alternativa defensiva ante tanta baja.

El canterano llegó al once casi por casualidad, por un nuevo contratiempo defensivo. Antes de dar a conocer el once, el Atlético de Madrid informó de una nueva lesión de José María Giménez, que no llegó a vestirse de corto y se convirtió en uno de los descartes en la convocatoria de Simeone.

Su puesto en la lista lo ocupó otro jugador del filial, Toni Moya, mientras que Montero formó como titular junto a Godín. El capitán tomó al joven defensa 'a su cargo' y le tuteló durante el partido en el Jan Breydel para completar un partido muy seguro atrás.

Sólo tuvieron un despiste y ahí volvió a aparecer Jan Oblak, el que nunca falla. Un centro en una contra desde la derecha le llegó a Luan Peres al segundo palo. El brasileño picó la pelota, pero el meta se tiró con todo para cubrir los posibles huecos y despejó el peligro.

Sin embargo, esta jugada no quita que el partido de Montero fue de una seguridad increíble. El sevillano estuvo muy atento para salir al corte y demostró que, por arriba, ha tenido buenos profesores con los dos uruguayos, Godín y Giménez.

Además, tuvo que lidiar durante casi todo el partido con una amarilla tempranera. El italiano Davide Massa le mostró la primera cartulina del encuentro en una jugada muy dudosa, pero eso no amedrentó al central. Supo jugar con ella hasta completar un encuentro que le coloca en una situación privilegiada dentro de los numerosos canteranos con oportunidades esta campaña