Lyon, la Europa League y el inicio de una era

El Atlético de Madrid regresará casi cinco años después a la Europa League, la competición que impulsó en 2012 al conjunto entrenado por Diego Pablo Simeone a las cotas más altas, pero ahora un mal menor dentro del imponente crecimiento desde entonces del equipo, siempre en la Champions en el último lustro.

Con dos finales (2014 y 2016), unas semifinales (la pasada temporada) y unos cuartos de final (2015) en el máximo torneo continental, la caída a la Europa League supone un indudable paso atrás, pero rememora también momentos vibrantes y de éxito de un equipo que al inicio de esta década sonreía a través de ese torneo.
En la primera edición de este certamen, ya bajo la actual denominación, el Atlético se proclamó campeón en 2010, con Quique Sánchez Flores al mando. Ganó la final en la prórroga al Fulham en Hamburgo (2-1), con dos goles de Diego Forlán, para conquistar un título europeo 48 años después del primero y único hasta entonces.
En 2012, también representó el inicio de la época más grande de la historia del club: la era Diego Pablo Simeone, que agarró su primer título en el banquillo del conjunto rojiblanco a través de esta competición. Después le siguieron, por ese orden, una Supercopa de Europa, una Copa del Rey, una Liga y una Supercopa de España, además de dos finales de la Liga de Campeones, las dos como subcampeón.
Todo empezó a nivel de trofeos el 9 de mayo de 2012 en el estadio Nacional de Bucarest, cuando el Atlético doblegó sin matices al Athletic (3-0), con dos golazos del colombiano Radamel Falcao y otro del brasileño Diego Ribas, directos a un título imborrable entonces y ahora, en el que participaron varios de sus jugadores actuales.
Ahí estaban ya Juanfran Torres, Diego Godín, Filipe Luis y Gabi Fernández, cuatro de los once titulares en aquella final, y Koke Resurrección, que entró al campo en el minuto 90. Cinco futbolistas que se reencuentran con la Europa League, cuya última participación rojiblanca, en 2012-13, terminó en dieciseisavos de final frente al Rubin Kazan, con derrota en casa (0-2) y victoria fuera (1-0).
El Atlético, además, encara como favorito el torneo, en el que ya están clasificados para dieciseisavos de final equipos como el Arsenal, el Dínamo de Kiev, el Lazio, el Milán, el Niza, la Real Sociedad, el Villarreal, el Zenit, el Sporting de Lisboa o el CSKA Moscú, entre otros, a la espera del desenlace tanto de la última jornada de la Liga de Campeones como de la propia Liga Europa.
El conjunto rojiblanco ya espera adversario en el sorteo del próximo lunes en la sede de la UEFA en la ciudad suiza de Nyon, pero también aguarda esta noche a la resolución del resto de cuartetos de la Liga de Campeones para saber si está entre los cuatro mejores terceros y, por extensión, confirmar si será cabeza de serie.
Desde el cambio de denominación de la Copa de la UEFA por Europa League, el Atlético ha jugado 42 partidos en esta competición, con un balance de dos títulos, 27 triunfos, ocho empates, siete derrotas, 71 goles a favor y 33 tantos en contra. Con Simeone, el equipo ha jugado 17 duelos, con 14 victorias y tres derrotas.