Que hablen, que el Real Madrid se dedica a ganar
Ante el Inter de Milán, este martes, el Real Madrid completó una racha de seis partidos en 16 días saldada con pleno: todo victorias. Las críticas que se cernían a principio de temporada sobre el equipo se han disipado después de su amplia ventaja como líder en LaLiga Santander y su clasificación a octavos de Champions como primeros de grupo. Y todo ello, con el estilo de Ancelotti: sin hacer ruido y con el trabajo bien hecho.
Los circos mediáticos están bien para que el aficionado se entretenga y suelen aparecer alrededor de todos aquellos equipos que no cumplen con su cometido, que es ganar. Críticas a los arbitrajes que siempre 'ayudan a los mismos', a la prensa que desestabiliza, a LaLiga por no dejar inscribir jugadores...
Ojo, que parte de la afición del Real Madrid también se suma a esto y critica absurdeces como que en Movistar+ monten campañas contra el club. Como si eso fuera a influir a Vinícius a la hora de regatear a un rival, a Courtois para salvar un mano a mano o a Benzema para anotar otro gol. Vamos a dejarnos ya de fantasmas.
El victimismo de algunos aficionados es tal que creo que prefieren perder y echarle la culpa a un enemigo externo que ganar.
Hay un grupo en el madridismo que necesita encontrar ese enemigo común y ni con su equipo brillando en esta temporada está tranquilo. Necesita encontrar ese problema extradeportivo para creerse su propia teoría del "solos contra todos". El victimismo de clubes de Primera División con presupuestos millonarios y capacidad de presión incalculable es una soberana ridiculez.
De ahí la importancia de hombres como Carlo Ancelotti que se dedican a lo suyo, y pocos lo hacen mejor que él. El vestuario, como se encargan de dejar claro los jugadores siempre que hablan, está a muerte con él y eso se traduce en el campo. El resultado de momento es perfecto y ya sólo queda que el italiano no caiga en sus propios errores y el equipo no se le caiga en primavera.