La fábula de Modric y el golpe que resucitó al Real Madrid
El Real Madrid se reconcilió con su afición en un partido con victoria por 2-0 ante el Sevilla. Un choque en el que, tras una mala primera mitad, Luka Modric tomó el mando en la segunda para resucitar al equipo.
Los mejores 45 minutos desde que Santiago Solari se sentara en el banquillo del Santiago Bernabéu llegaron ante los hispalenses. Todo después de un primer tiempo de tedio, en el que sólo el desparpajo de Ceballos y Vinícius parecía traer algo diferente. Con decir que el único aplauso se lo llevó Ramos tras cortar una contra...
Sin embargo, la segunda mitad fue completamente distinta. El Sevilla, que ya había aparecido poco en el inicio, desapareció completamente. Si el centro del campo había sido una de las claves en las pasadas temporadas, este resurgió este sábado con Luka Modric a la cabeza.
El croata sólo apareció antes de la reanudación para llevarse un golpe de Franco Vázquez. Un choque que le llevó a colocarse una aparatosa venda y, como milagro, le hizo recordar quién era: nada menos que el actual Balón de Oro.
Como Jesucristo hiciera con Lázaro, Modric le gritó al Real Madrid: "¡Levántate y anda!". Y el equipo cambió
Por ello en la segunda mitad fue otra historia. Ceballos hizo de Kroos y Casemiro del propio Casemiro para volver a hacerse fuertes en la segunda parte. Modric pudo hacer el primero en un par de ocasiones que se marcharon fuera por muy poco. El croata ya avisaba.
Tuvo que ser otro de esos pilares como Casemiro el que abriera el marcador. Si los centrales sevillistas impedían colarse en el área, el brasileño se sacó un misil desde su casa que se coló tras rebotar en el larguero. Un tanto que le daba tranquilidad a los locales y hacía justicia con lo visto después del descanso.
Sin embargo, aún faltaba el premio para Modric en forma de gol. Este llegó ya en el descuento, después de un error sevillista y una gran definición delante de Vaclik. Un tanto que confirma que 'The Best' ha vuelto a hacer honor a su galardón.
