Y al final... ¡apareció!

Nueve goles desde agosto hasta mayo. Nadie se explicaba que con estas cifras, Karim Benzema siguiese jugando de delantero centro en el Real Madrid, pero Zidane apostó por él contra viento y marea y este premio llegó con sus tantos para meter a los blancos en la final de Champions.

 
Las críticas llegaban desde todos los sectores del madridismo y, mientras, el punta francés recibía el cariño tanto en los entrenamientos como en sala de prensa de Florentino Pérez y Zinedine Zidane, sus dos principales benefactores en el conjunto blanco.
Como puntos a favor de sacarle de inicio, es cierto que Cristiano Ronaldo juega mucho mejor con él al lado. El portugués aumenta sus cifras de goles con la presencia de Karim junto a él en la delantera. Esto se notó en Múnich, cuando el '7' blanco se encontró más desaparecido y con menos ocasiones que en otros duelos.
El otro era su historia. Benzema es el séptimo máximo goleador de la historia del club blanco y el sexto de la historia de la Copa de Europa. Además, sus cifras se incrementan en los grandes partidos, duelos como el de este martes ante el Bayern.
Por eso, al igual que en 2014, apareció en el segundo palo cuando más apretaban los bávaros. En el minuto 11, para empujar de cabeza a la red un centro de Marcelo. A los pocos segundos de la segunda parte sacaría provecho de la presión a Ulreich para empujar la pelota a la red cuando el meta falló.
Dos tantos más propios de un auténtico 'nueve'. Dos tantos que le dan a Benzema todo el crédito perdido durante la temporada justo en el mejor momento.