Una brecha con el vagón de cola
Sigue su adaptación el Málaga Femenino a la Liga Iberdrola. Tras ocho jornadas, el balance resulta satisfactorio. Las de Antonio Contreras abrieron una brecha de seis puntos con el vagón de cola, lo que supone un renta holgada a estas alturas. Una dinámica ascendente con que llegan al parón liguero por selecciones de este fin de semana sumando tres victorias en los cuatro partidos recientes, la última ante el Madrid en Coín. "Cuando empiezas la temporada con la dinámica negativa le das al palo o se va fuera. Ahora estamos en una dinámica distinta", aseguraba la capitana Adriana Martín.
Un tramo de calendario prolífico que le permitió recuperarse de un inicio dubitativo, donde el acople a la categoría aún no era pleno. No se amilanó el conjunto blanquiazul, que esperó su momento. El punto en Paterna insufló la confianza para esta ráfaga de triunfos. Una cadena donde juntó varios eslabones básicos para consolidarse en el primer escalón nacional. Se solidificó en casa, pese al tropiezo con el Granadilla, y se hizo grande lejos de Málaga. Además, las delanteras comenzaron a ver puerta, uno de los déficits en la génesis del curso. Patricia Mascaró y Adriana Martín ya golean y el conjunto de Contreras nota el impulso positivo.
Como es obvio, aún quedan campos de mejora en el Málaga Femenino. Una de ellas es pertrechar la portería propia. Sólo quedó a cero frente al Valencia, en un partido que marca la senda a seguir. Es el tercer conjunto más goleado con 16 tantos encajados, dudoso honor que comparte con el Sevilla. Diez en las tres primeras jornadas, lo que evidencia un paso adelante. No obstante, aún queda una vuelta de tuerca que supondrá un salto de nivel considerable.
Una dinámica al alza que le permite respirar en un mes de noviembre con compromisos importantes. El próximo rival en la Liga Iberdrola es el Levante, tercero en la tabla y quizá el conjunto más potente junto al Atlético de Madrid y el Barcelona. Las granotas cuentan con futbolistas de la talla de Marta Corredera y Sonia Bermúdez, ambas fijas para Jorge Vilda, que analizó a las malagueñas hace unas semanas. Unos días después vendrá el estreno en la Copa de la Reina, donde esperan las rojiblancas. Un hueso duro para un momento distinguido. Una cuesta próxima para afrontar con calma después del hueco abierto con el descenso.
