Vuelve el verde a La Rosaleda

Fue acabar el Málaga-Numancia y los operarios se pusieron rápidamente en marcha para comenzar a cambiar el césped de La Rosaleda. Nada más terminar el partido se empezó a cortar y retirar la hierba antigua y días después el recinto de juego quedó casi totalmente pelado, sólo quedaba la arena a la espera de que germinara la nueva hierba.

Y ya se aprecian los brotes de ese nuevo césped, que deberá estar en buenas condiciones para el próximo sábado 17 de noviembre, día en el que el Málaga recibe al Nástic de Tarragona en el partido correspondiente a la jornada 14 de LaLiga 1|2|3. El color marrón de la arena ha pasado a un tono verde que refleja ese crecimiento de las semillas de la nueva piel de La Rosaleda.

Así es el procedimiento

Se trata de un proceso nada agresivo, es una transición natural y menos drástica, al 'convivir' en el terreno de La Rosaleda las semillas específicas para los climas de verano y de invierno, la Bermuda y la Ray-Grass. Los trabajos consistieron en cortar la hierba actual para que crezcan las semillas de invierno que hay debajo. Los dos partidos consecutivos a domicilio, en Pamplona y Gijón, han dado margen para efectuar una operación habitual cada invierno. Normalmente se aprovechaba algún parón de selecciones en Primera. Ahora, desgraciadamente, no hay parones y ha habido que esperar a esta coyuntura.

En el Anexo se realizó el mismo proceso y ha resultado un éxito, allí se ha entrenado el equipo esta semana porque el Ciudad de Málaga también está cambiando de piel. No se queda ahí el cambio de césped en las instalaciones. El club también adecúa el del Campo de la Federación Malagueña para, si todo marcha según lo previsto, terminar en última instancia con el de El Viso, donde entrena habitualmente el Atlético Malagueño.