Los equipos de Muñiz sufren en noviembre

Noviembre no ha sido un mes favorable para el Málaga. El conjunto blanquiazul ha visto como durante este periodo ha pasado de la primera plaza de la tabla clasificatoria a verse quinto. Pero, observando resultados anteriores, es habitual que los equipos entrenados por Juan Ramón Muñiz tengan un bajón de rendimiento por esta altura del campeonato, incluso aquellos que lograron ascender, como el Málaga en 2008 o el Levante en 2017.

El Málaga cerró el mes de octubre con una victoria en La Rosaleda por 2-0 ante el Numancia. Eran momentos de felicidad, con un equipo solvente, un goleador en racha y un primer puesto defendido con solvencia. Pero, cinco jornadas después, sólo ha logrado sumar una victoria ante el Nástic y un empate ante el Sporting, perdiendo en sus visitas al Osasuna y al Extremadura y en casa el último encuentro ante el Granada. 5 puntos de 15 posibles que le han hecho caer a la quinta posición en la clasificación.

Observando al Málaga de la temporada 2007/2008, que también estaba dirigido por Muñiz, se puede ver cierto paralelismo. Ese equipo comenzó la temporada como un tiro, en la jornada 9 acumulaba ocho victorias. Pero, en los seis encuentros posteriores, sólo pudo sumar dos triunfos y un empate, 7 puntos de 18 posibles.

Incluso aquel Levante de la temporada 2016/2017, que dejó en la retina de todos la sensación de superioridad, tuvo un bache en el mes de noviembre, logrando únicamente 5 puntos en cinco jornadas justo antes de llegar a diciembre y encadenar seis victorias de forma consecutiva. También puede verse que no le fue bien en este mes a Muñiz ni con el Alcorcón ni con el propio Levante en LaLiga Santander.

Las causas que provocan esta situación pueden ser diversas, bien por una fuerte preparación en verano para tener un buen comienzo que lleva a un bajón, esos picos de rendimiento que hay durante una temporada, o por el simple hecho de un exceso de trabajo físico en búsqueda de llegar en un estado de forma ideal a la parte final del campeonato, cuando de verdad se deciden los premios.

Lo cierto es que el estilo de preparar los equipos por parte de Muñiz ha demostrado, en el propio Málaga y en el Levante, que los objetivos acaban lográndose. Si ya fue el método acertado en dos ocasiones, ¿por qué no iba a funcionar esta vez?