El discípulo de Míchel
El nuevo entrenador del Málaga, Víctor Sánchez del Amo, tiene una importante vinculación con otro técnico que pasó recientemente por el banquillo blanquiazul, Míchel, que fue quien le dio la alternativa en la dirección llevándole como segundo. Es un caso curioso, porque Víctor fue su sustituto como jugador en la banda del Santiago Bernabéu. Es su discípulo más aplicado.
La primera coincidencia entre ambos fue vestidos de corto. El último partido como futbolista de Míchel en el Real Madrid coincidió con el debut en partido oficial de un joven canterano muy prometedor que jugaba también por la banda derecha, Víctor. Ambos saltaron al campo en los últimos minutos de un Zaragoza-Real Madrid que cerraba la temporada 1995/1996. Al año siguiente, Míchel se marcharía a jugar a México con Butragueño al Celaya y Víctor se haría con la titularidad de la mano de Capello.
Años después, cuando Víctor colgó las botas, comenzó a preparar su carrera como entrenador. Entonces, Míchel contactó con él y lo unió a su cuerpo técnico cuando dirigía al Getafe. Era la temporada 2010/2011. Al término de la misma, ambos dejaron el banquillo azulón. El siguiente reto llegó unos meses después, cuando el Sevilla contrataba ya mediada la temporada a Míchel y éste llevaba dentro de su equipo a Víctor Sánchez del Amo.
Tras un año completo en el club hispalense, llegó una aventura en el extranjero, y el equipo continuó trabajando junto en Grecia. Ambos se fueron a dirigir al Olympiacos, donde llegaron en febrero de 2013, para acabar en esa temporada logrando la Superliga griega y la Copa. El título liguero lo revalidaron en la campaña siguiente, en la que también hicieron un buen papel en la Champions. Sin embargo, Míchel fue destituido en enero de 2015 del club ateniense, separándose aquí los caminos de los dos madrileños.
Víctor comienza su propio camino
Pocos meses después de dejar el Olympiacos y el cuerpo técnico de Míchel, Víctor comenzó como primer entrenador en el Deportivo de la Coruña, donde logró buenos resultados, dos permanencias incluidas. Arrancaba así su carrera como técnico, que luego pasaría por el propio club griego y el Betis antes de recalar en el Málaga. Pero no viene sólo Víctor de ese equipo de trabajo que lideraba Míchel. A su cuerpo técnico se unió años atrás el analista Carlos Morales, que anteriormente trabajó con Míchel y que formará parte del equipo del nuevo técnico malaguista, al que acompaña a la Costa del Sol para buscar el ansiado ascenso.
Víctor reconoció durante su presentación no haber hablado con Míchel antes de embarcarse en esta nueva etapa al frente del Málaga, pero a la vez tuvo palabras para su hijo Adrián, uno de los capitanes: "Me atrevería a decir que es el buque insignia del equipo, hemos hablado con el personalmente porque es un jugador importantísimo en todos los aspectos. Queremos que siga siéndolo y queremos ayudarle a potenciarlo para que lo sea más".
