Víctor: "Tenemos potencial para llegar al ascenso directo"

Víctor Sánchez del Amo ha aterrizado en la sala de prensa de La Rosaleda con un discurso antagónico y totalmente diferente al que ha promulgado durante los últimos diez meses Juan Ramón Muñiz. Ha puesto el listón del equipo en el ascenso directo, ha prometido una propuesta valiente y dominadora y ha afirmado que hay plantilla suficiente como para ganar todo lo que queda de aquí al final. Revitalizar anímicamente al equipo es clave y el madrileño quiere que su discurso cale dentro y fuera del vestuario. “Los cambios provocan un reinicio en cuanto a expectativas y a activación. Se ve desde el primer día, no hace falta que el entrenador toque ninguna tecla para esa activación, para la motivación y para que estén enchufados. Empieza una Liga de ocho partidos. Venimos con esa máxima ilusión. Es una Liga nueva donde ya tenemos un partido ganado y donde estamos convencidos de que el potencial de la plantilla es para ganar los siete partidos restantes. Creemos en el potencial de los jugadores para afrontar ese reto. La mayor manera de afrontarlo es con ilusión. Es una oportunidad fantástica para el Málaga para volver a Primera. Tenemos la suerte y el privilegio de haber sido elegidos para intentarlo”, afirmó el técnico.

El objetivo, para Víctor, no ofrece ninguna duda: “Los cambios se producen para buscar algo diferente y normalmente siempre para tratar de que sean a mejor. Nuestra idea es muy sencilla, ayudarles a que los jugadores den la mejor versión de ellos mismos. Creemos en el potencial que tienen, tanto individual como colectivamente. Vamos a tratar de meterles en su cabeza que tienen potencial para llegar al ascenso directo. Estos siete partidos vamos a ir a por ellos. Al menos para quedarnos con la conciencia tranquila. Tenemos potencial y en eso creemos. Por eso estamos aquí. Teníamos la oportunidad de firmar en otros clubes del extranjero, ofertas importantes, pero no lo dudamos y vinimos aquí”.

"Hay plantilla para ganar los siete partidos restantes"

Una de las recetas que incluye su terapia para tratar de reconducir la situación del Málaga apunta al estado mental del equipo: “En el alto rendimiento el aspecto anímico es determinante. Trabajamos mucho el aspecto emocional de los futbolistas. Cualquier estímulo externo, las cosas que suceden, nos provocan reacciones. Eso se trabaja para tratar de analizarlas hacia un estado de ánimo que te lleve a ser productivo. Estamos trabajándolo desde el primer momento. Estamos trabajando para mejorar en todo. Cuando estemos muy bien seguiremos trabajando para estar mejor. El mensaje está claro: hambre y humildad. Hambre para aspirar a lo máximo y humildad para seguir mejorando siempre”.

El nuevo preparador blanquiazul ha abordado un amplio número de preguntas durante su presentación:

Tiempo sin entrenar: “He cambiado, sin duda. Esa filosofía que compartimos con los jugadores, hambre y humildad, la practicamos nosotros. No tendría credibilidad si no loa planteásemos nosotros como metodología. Las experiencias que tenemos las usamos para que nos ayuden a seguir creciendo. Las cosas que nos pasan no son ni mejor ni peor, son necesarias. Está en nosotros la capacidad de analizarlas y aprender de ellas, estés como estés”.

¿Habló con Míchel?: “No he hablado con Míchel. Tenemos a Adrián, capitán del equipo. Hemos hablado con él personalmente porque es importantísimo para el equipo, en todos los aspectos”.

Falta de ‘feeling’ con la grada de algunos entrenadores: “Me he criado en el Real Madrid y dede pequeñito la máxima exigencia la he tenido alrededor de mí, a todos los niveles. En el mundo del entrenador, en España y lo podemos extrapolar a otras Ligas, en esa situación de cambio de entrenador es frecuente. A veces no se da a los entrenadores el tiempo suficiente para desarrollar los proyectos. Cuando se deja trabajar suelen consolidarse y alcanzar la estabilidad deportiva. Pero el corto plazo manda. Es lo que toca y nos tenemos que adaptar. No queda otra. En Andalucía he trabajado en los dos clubes de Sevilla, aficiones tremendamente pasionales, he jugado contra el Málaga como jugador y entrenador y he visto esa presión que ha permitido al Málaga dar un rendimiento mayor. La Rosaleda siempre ha apretado y mucho. No hay que pedirle nada a la afición porque eso lo tiene en su ADN. Hay que darle los ingredientes para que eso salga de forma natural”.

"La Rosaleda siempre ha apretado y mucho. No hay que pedirle nada a la afición"

Conocimiento de Segunda: “Vamos a trabajar todos los aspectos. No hay una necesidad específica en el Málaga para trabajar esos aspectos como si fuesen carencias. En la situación en que está el Málaga, en una racha de resultados negativa, eso lleva a tener que trabajar el aspecto mental para recuperarlo. La categoría es de máxima igualdad entre todos los equipos, esa es la diferencia entre Segunda y Primera. Hay grandísimos clubes en Segunda, históricos de Primera, y hoy en día, la metodología de trabajo ha avanzado tanto que se pueden aportar muchas diferencias para darle otro rendimiento y poder competir”.

Un año más si sube: “No tiene más importancia, entiendo que si conseguimos el objetivo y si hay éxito, entiendo que todos vamos a estar de acuerdo. Para nosotros lo único que hay en nuestra cabeza es la Liga de ocho partidos. Luego vamos a estar encantados para seguir”.

¿Habló con Muñiz?: “No he hablado con Muñiz, no hemos coincidido”.