El Málaga cuenta con los fichajes 2014-15

Los fichajes que el Málaga realizó para la temporada que está a punto de finalizar, seguirán todos salvo que llegue alguna oferta importante por alguno de ellos o alguna situación en la que la entidad y, sobre todo, el técnico entiendan que es mejor abrirle las puertas.
Nos referimos a hombres con contrato en vigor y propiedad del Málaga como Ochoa, Rosales, Boka, Miguel Torres, Horta y Filipenko, que llegó en el mercado invernal. Luego está el caso de Nordin Amrabat y sus matices.

Hubo más refuerzos como Luis Alberto, que llegó cedido por el Liverpool por dos campañas, aunque el segundo año se puede romper. Gracia no está contento con él. Sólo hay que ver cómo ha desaparecido del equipo. Pero en el club se pensaba que podía ser aprovechable. De todos modos, no es el caso que nos ocupa.
De los hombres que llegaron en verano, si hay uno con posibilidades de salir es Guillermo Ochoa (firmado hasta 2017). El mexicano no está contento con su suplencia, pero tiene contrato en vigor y no aparecen compradores. Al menos no que satisfagan al club. Puede ser uno de los culebrones veraniegos, pero la intención de la entidad es que siga.
Rosales (hasta 2017) ha sido el más regular de todos y Gracia está satisfecho con él. Con Boka (hasta 2016) y Miguel Torres (hasta 2018) no hay dudas. Aunque no se les vea como titularísimos, el balance de ambos es positivo.
Ricardo Horta (hasta 2019) fue la gran apuesta del año pasado de Mario Husillos. Joven y con mucha proyección, costó una cantidad importante por un porcentaje de su propiedad. A Gracia fue el futbolista que más le sorprendió en pretemporada por actitud, trabajo y talento. Empezó como titular y apuntando alto, pero se fue diluyendo y se topó con el muro malagueño (Samu, Samu Castillejo y Juanmi). Aun así ha jugado con regularidad ya fuese como reserva o –algo menos- como titular. Hay muchas esperanzas en él porque además se entiende que era complicado por su proceso de adaptación a un fútbol más exigente, lejos de casa, con otro idioma, otras costumbres…
Filipenko (hasta 2018) fue fichado en el mercado invernal. En el club se cree que puede ser un futbolista más que interesante y se argumenta que tiene experiencia Champions e internacional. Su gran hándicap es el idioma, lo que dificulta más aún su aclimatación, ya de por sí difícil para alguien que viene de un fútbol y un país radicalmente distinto. Gracia tiene sus dudas, pero entendió que en estos meses Filipenko difícilmente podría tener un rendimiento inmediato. Ahora se le dará la oportunidad de ganarse un sitio partiendo en igualdad de condiciones.
Queda un ‘fichaje’, que en realidad no se puede contar como tal siendo estrictos. Nos referimos evidentemente a Nordin Amrabat, que llegó como refuerzo pero en calidad de cedido. Realmente es ahora cuando se convierte en fichaje y para ser una de las piedras angulares del proyecto del Málaga 2015-16.
Javi Guerra no entra en estas cuentas puesto que no deja de ser un futbolista cedido y sin opción de compra. Así están las cosas, el club no para la maquinaria y ya sólo piensa en la campaña 2015-16. El núcleo de los fichajes, y en ese sentido Gracia también lo es, se mantiene.