Álex Robles, del instituto al Camp Nou

Álex Robles vive los días más felices de su todavía corta pero prometedora carrera. A sus 18 años, es un habitual en los entrenamientos del primer equipo desde hace tiempo, pero este fin de semana le ha llegado la oportunidad de entrar en una convocatoria, nada más y nada menos que para visitar al Barcelona. En menos de 24 horas, el lateral de Pizarra ha soltado la mochila y los libros y ha hecho el macuto para viajar a la Ciudad Condal, un sueño hecho realidad que describe así: "Muy contento, no me lo esperaba. De pronto se ha caído Ricca y Miguel Torres tenía molestias y me ha llegado la convocatoria. Es una pena que toque por las lesiones de compañeros, pero me ha entrado un cosquilleo por la barriga... Estoy flipando. Yo pienso en trabajar y si tengo que jugar pues mejor".

El joven malaguista, todavía en edad juvenil, compagina el fútbol con sus estudios de Bachillerato en el I.E.S. Valle del Azahar, en Cártama Estación. Tras dos años de parón por no poder compatibilizar entrenamientos y clases por temas de horarios, este año ha podido apuntarse al instituto por la tarde: "Empecé Bachillerato hace dos años pero no pude compaginarlo por el tema de entrenar por las mañanas. Ahora voy por la tarde, estoy en primero y he cogido la vertiente de sociales. Quiero acabar Bachillerato y luego estoy pensando hacer un módulo de grado superior o ir a la universidad".
Lunes, miércoles y viernes, Álex Robles deja las botas tras el entrenamiento de turno y hace la mochila para acudir como cualquier otro alumno a sus clases de Historia, Matemáticas o Economía. Y se le ve con ganas, de ahí que aproveche el tiempo libre para ponerse al día: "Cuando tengo ratos libres estudio y hago los deberes, aprovecho para ponerme al día. Los profesores me ayudan, cuando tengo viajes me dicen que haré los exámenes cuando pueda. ¿Los compañeros? De momento no me conocen mucho, es pronto. Con el paso del tiempo espero que me conozcan más".
Y este sábado puede ser un buen día para darse a conocer... El pizarreño,  fijo en las categorías inferiores de la Selección y recientemente renovado hasta 2020, ha entrado en la convocatoria de Míchel para el Camp Nou (no es la definitiva, habrá dos descartes) y de sus palabras se extrae la ilusión y las ganas de un niño que se está haciendo grande, un estudiante de primero de Bachillerato que esta tarde pisará el césped de uno de los estadios más importantes del mundo.