Interlagos recibió a los pilotos con una densa lluvia que impidió probar los neumáticos experimentales de Pirelli con vistas a 2014. Solo Sebastian Vettel se animó a montar las gomas nuevas, aunque en mojado apenas pudo sacar conclusiones. En realidad no fue un día productivo para extraer impresiones. Y es que los pilotos punteros apenas montaron los neumáticos de lluvia extrema a pesar de que se espera una clasificación en mojado.
En todo caso, la meteorología dio una tregua en la primera sesión, en la que se registraron los mejores tiempos del día con los Mercedes marcando los mejores tiempos seguidos, por este orden, de Vettel, Button y Alonso. El final de esta, con el cielo algo despejado, hacía preveer una segunda sesión en seco, pero no fue así. La lluvia no cesó e incluso aumentó su intensidad dejando un trazado casi impracticable.
Así, gran parte de las escuderías montaron los neumáticos de lluvia extrema de cara a la clasificación de mañana, aunque otros pilotos como Alonso los reservaron para el sábado y optaron por los intermedios. Un compuesto que no era el idóneo en ese momento, por lo que solo puso ser undécimo en los últimos libres. En su beneficio, el asturiano cuenta con todos sus juegos nuevos en busca de una buena plaza en la parrilla de salida.
Ahora, tras la primera jornada del GP de Brasil, ya solo resta la última tanda de libres antes de la clasificación, prevista para el sábado a las 17:00 horas. Si finalmente esta se produce en lluvia Fernando Alonso tendrá más opciones de estar con los mejores.