El inglés Lewis Hamilton, que ya lo había hecho en 2008, con McLaren, se proclamó campeón del mundo de Fórmula Uno a bordo del dominante Mercedes, la temporada en la que el doble campeón mundial español Fernando Alonso y la escudería Ferrari, la más exitosa de la historia, pusieron fin a cinco años de matrimonio.
Hamilton, de 29 años, firmó la mejor temporada de su carrera en F1, ganó once carreras y se anotó su segundo título mundial al sumar 384 puntos, 67 más que su compañero alemán Nico Rosberg, con el que festejó asimismo la primera corona de constructores para las 'flechas de plata', que dominaron con claridad una nefasta campaña de Ferrari en la que Alonso acabó sexto el campeonato (con 161). Lewis y Nico -ganador de cinco carreras- coparon doce veces la primera fila de la parrilla y firmaron once 'dobletes', en un año en el que sólo su duelo interno y la puntuación doble en la última carrera mantuvieron en cierta medida la emoción de un certamen que ya desde el principio se inclinó hacia la escudería de Brackley, que puso fin a cuatro años de tiranía deportiva de Red Bull. El australiano Daniel Ricciardo se erigió en la gran revelación, al ganar las únicas tres carreras (en Canadá, Hungría y Bélgica) que no se anotó Mercedes. Acabó tercero el Mundial, con 238 puntos, 52 más que el finlandés Valtteri Bottas -la otra sorpresa-, que, junto al brasileño Felipe Massa, 'recuperó' a Williams para la F1. Y le arrebató el trono interno en el equipo del toro rojo al alemán Sebastian Vettel, cuádruple campeón los cuatro años anteriores. Vettel acabó quinto (167) y anunció su marcha de Red Bull (le sustituirá el ruso Daniil Kvyat) durante el Gran Premio de Japón, en el que se registró el peor momento del año, con el brutal accidente del francés Jules Bianchi (Marussia), que chocó en Suzuka contra una grúa y aún se encuentra en estado grave. 'Seb' no anunció en ese momento su destino, oficial semanas más tarde: el año que viene será el nuevo compañero en Ferrari del finés Kimi Raikkonen, último campeón mundial de la 'Scuderia', en 2007. Al que Alonso 'machacó' en pista, como mal menor personal en una de los peores años de la historia de Ferrari, el equipo con más títulos en la F1 y el único presente en todas las ediciones desde su creación, en 1950. Fernando exprimió todo lo que pudo el coche rojo, con el que logró tres subcampeonatos; pero once victorias y, sobre todo, cuatro 'poles' en cinco años parecen un botín exiguo. El desastre de 2014 fue el colofón a varios años de errores que provocaron la salida -a principios de curso- del jefe de equipo, el afable Stefano Domenicali, y se llevaron por delante al presidente, Luca Cordero di Montezemolo, que vivió en primera fila los años gloriosos del austriaco Niki Lauda y del alemán Michael Schumacher. A Domenicali lo sustituyó Marco Mattiacci, del que también se prescindió a final de curso. El año próximo dirigirá los destinos del equipo de Maranello Maurizio Arrivabene, con quien Alonso (que sólo pudo subir a dos podios: fue segundo en Hungría y tercero en China) compartió su último acto 'ferrarista': la comida de Navidad. El doble campeón mundial asturiano (2005 y 2006, con Renault), de 33 años -con 32 victorias y 22 'poles' en la categoría reina-, será de nuevo piloto de McLaren, destino adelantado por el Rey Juan Carlos I en Abu Dhabi al canal de televisión Antena 3; y que se oficializó el 11 de diciembre en Woking (Inglaterra). Alonso volverá a pilotar para el equipo en el que vivió su particular 'annus horribilis' en 2007, año en el que compartió garaje con el debutante Hamilton y que acabó como el rosario de la aurora. Estará de nuevo a las órdenes de Ron Dennis y tendrá por compañero al inglés Jenson Button (15 victorias y ocho 'poles'), campeón mundial en 2009 (con Brawn), con el que coincidió durante 2002, cuando el genio astur era probador en Renault. No será el único español, ya que el madrileño Carlos Sainz, hijo del doble campeón mundial español de rallys de mismo nombre y ganador de las "World Series", se sentará al volante de un Toro Rosso, equipo en el que será compañero del holandés Max Verstappen, que se convertirá, con 17 años, en el debutante más joven. Ambos (suman 37 años) integrarán la formación de menor edad, mientras que la de Alonso y Button (que en enero cumple 35) será la más veterana, en una parrilla en la que el mexicano Sergio Pérez repetirá con Force India. 'Checo' acabó décimo el Mundial, con 59 puntos, en su cuarta temporada en F1, la primera con su nuevo equipo, con el que firmó su cuarto podio, al ser tercero en Bahrein. Su compatriota Esteban Gutiérrez no logró puntuar y tras dos años en Sauber, no seguirá en la Fórmula Uno. Pastor Maldonado, único venezolano que ha ganado un Gran Premio -el de España de 2012, con Williams- sufrió todo el año con un Lotus que nunca dio la talla y con el que sumó dos puntos para concluir decimosexto el campeonato.