Cuando el próximo 13 de marzo Sebastian Vettel se ponga al volante de su nuevo coche para la primera sesión de entrenamientos libres de la temporada 2015 de Fórmula 1, se convertirá en el quinto alemán que ha pilotado un Ferrari en la competición de monoplazas más famosa del mundo.
El anterior fue Michael Schumacher, que disputó 180 Grandes Premios con la Scuderia, logrando 72 victorias y nada menos que cinco títulos mundiales. Pero la relación de los pilotos alemanes con el equipo de Maranello se remonta varias décadas atrás.
Otro germano en contribuir con la historia del equipo más popular del mundo fue Wolfgang Von Trips, que cuando se encaminaba hacia el campeonato del mundo de 1961, falleció en un terrible accidente en Monza, en el que murieron también 14 espectadores. Disputó para Ferrari 25 Grandes Premios, con dos victorias.
Los dos restantes en la lista de alemanes de Ferrari tuvieron un papel más modesto. Por un lado, Kurt Adolff, que participó en el Gran Premio de Alemania de 1953 al volante de un Ecurie Espadon 166, teniendo que retirarse. Y por otro, Hans Stuck, también con un Ecurie Espadon, tomando parte en la clasificación del Gran Premio de Italia de 1952, sin llegar a superar el corte.
Vettel, por tanto, es el quinto alemán en llegar a Maranello. Y lo hace con títulos mundiales en su haber antes de subirse a uno de los bólidos rojos, como en su día hicieran Michael Schumacher, Juan Manuel Fangio, Fernando Alonso y Alain Prost. Los dos primeros lograron ampliar su palmarés con más títulos de pilotos en su etapa con Ferrari.