El inglés Lewis Hamilton (Mercedes) intentará reforzar su liderato en el Mundial de Fórmula 1 este domingo en el Gran Premio de Bélgica, que afrontará desde el primer puesto de parrilla en Spa-Francorchamps. Donde se volvió a exhibir, firmando la 'pole' con nuevo récord del circuito, en un día más que triste para Ferrari, la escudería más laureada de la historia.
Lewis Hamilton, de 35 años, que pretende igualar los siete títulos que hasta la fecha sólo ganó el alemán Michael Schumacher, amplió a 93 su propio récord histórico de 'poles' al cubrir los 7.004 metros de la mítica pista belga en un minuto, 41 segundos y 252 milésimas. La vuelta rápida de todos los tiempos. Con la que superó en más de medio segundo a su compañero finlandés Valtteri Bottas, segundo en una calificación que el español Carlos Sainz (McLaren) acabó séptimo; y el mexicano Sergio Pérez (Racing Point), octavo.
El excéntrico y espectacular campeón de Stevenage saldrá por quinta vez primero este curso, tras elevar a seis su propia plusmarca de 'poles' en Spa-Francorchamps, al añadir la de este sábado a las que firmó en 2008, 2013, 2015, 2017 y 2018.
El séxtuple campeón mundial apuntará, también, a su quinta victoria del año, la octogésima novena desde que pilota en la categoría reina. Que lo situaría a sólo dos de otro de los récords históricos del 'Kaiser'.
Pole for @LewisHamilton at Spa - and a new track record 🚀
Listen as he dedicates number 93 of his career to the late Chadwick Boseman #BelgianGP 🇧🇪 #F1 pic.twitter.com/OjOZ7760gP
— Formula 1 (@F1) August 29, 2020
Después de que el holandés Max Verstappen (Red Bull) -segundo en el Mundial, a 37 puntos del inglés-, que saldrá tercero este domingo, fuese el más rápido el viernes, Lewis Hamilton recuperó el pulso y lideró el tercer y último ensayo, en el que aventajó en 230 milésimas al francés Esteban Ocon (Renault), después de que Bottas se fuera ancho en la primera curva de su vuelta y acabase quinto.
En el último libre, todos lograron su mejor crono justo al final, con gomas blandas. Y Ferrari, que el viernes dejó el circuito con el raquítico decimoquinto del monegasco Charles Leclerc y un pobre decimoséptimo del alemán Sebastian Vettel (cuatro veces campeón del mundo, con Red Bull, entre 2010 y 2013), lo hizo aún peor.
Leclerc -que, con todo, no deja de ser cuarto en el Mundial, aunque ya a 87 puntos de Hamilton- fue decimoséptimo. Y Vettel, vigésimo. Es decir: el último. Con esta perspectiva, no pocos preparaban ya, para la primera ronda de la calificación la crónica (en rojo) de una muerte anunciada.
Los Ferrari se salvaron por los pelos en la Q1: Vettel marcó el decimotercer crono y Leclerc, el decimoquinto. El que marcaba el corte. Del que no se libró el finlandés Kimi Raikkonen (Alfa Romeo), el más ilustre eliminado del primer acto de la crono principal. El último campeón mundial que festejó la 'Scuderia'. Allá por 2007.
Kimi se quedó a sólo 87 milésimas del talentoso monegasco (el equivalente a 5 metros), principal víctima de un coche que no va y que le impedirá unirse a Verstappen en su afán por convertirse este año -siempre y cuando se destrone a Hamilton- en el campeón más joven de la historia. Ese récord, si todo sigue así, lo conservará Vettel, cuyo peor puesto en una parrilla de Spa era un noveno; y que tras la calificación admitió que "sencillamente, no" tienen "más".
Con dos monoplazas muy inestables, Leclerc (decimotercero, a 982 milésimas) y Vettel (decimocuarto, a segundo y dos décimas) se despidieron en la segunda sesión. Ambos arrancarán desde la séptima fila, por detrás de los Alpha Tauri (ex Toro Rosso) del ruso Daniil Kvyat y del francés Pierre Gasly.
Lewis Hamilton, que encabezó todas las tablas de tiempos del día, no iba a dejar de hacerlo a la hora de la verdad. Y en su sensacional última vuelta mejoró en más de medio segundo a Bottas, al volante de la otra 'flecha plateada'. Ahora de negro, contra el racismo.
El inglés siguió mejorándose a sí mismo, batió el récord del mítico circuito; y dedicó esta 'pole' al actor estadounidense Chadwick Boseman, el protagonista de 'Black Panther', fallecido el viernes a los 43 años.
Detrás de una nueva primera fila íntegra de Mercedes, junto a Verstappen -que al igual que los anteriores y a diferencia del resto (que lo hará con blando) arrancará con neumático de compuesto medio, el que usaron en la Q2- saldrá el australiano Daniel Ricciardo (Renault), cuarto en la calificación, después de haber acabado segundo el viernes.
Desde la tercera fila arrancarán el otro Red Bull, el del tailandés Alex Albon, y el Renault de Ocon. Y desde la cuarta hilera lo harán Sainz y 'Checo'.
Sainz -noveno en el tercer libre-, que en Barcelona recuperó la senda correcta al acabar sexto el Gran Premio de España, saldrá séptimo, gracias a una gran vuelta en la Q1 que le permitió reservar dos lotes de neumáticos para la tercera ronda.
El madrileño, noveno en el Mundial (con 23 puntos), mejoró en una décima el tiempo del mexicano (octavo, con 32); que, tras perderse las dos carreras de Silverstone (Inglaterra), a causa de sendos positivos por coronavirus, también recuperó el rumbo en Montmeló. Donde, al acabar quinto, firmó su mejor puesto de la temporada.
Por detrás de ellos lo harán, desde la quinta fila, sus colegas: el canadiense Lance Stroll, vecino de garaje de 'Checo' -décimo en el último ensayo-, largará noveno. Y el inglés Lando Norris, compañero de Sainz, tomará la salida desde la décima plaza. En una carrera prevista a 44 vueltas, en la pista más larga del campeonato, para completar un recorrido de 308 kilómetros.