El 28 de julio de 2022, Sebastian Vettel dijo adiós a la Fórmula 1. Lo hizo desde Aston Martin tras quince años montado en el monoplaza de la categoría reina. Vettel besó el cielo en cuatro ocasiones. En 2010, en 2011, en 2012 y en 2013, siempre con la escudería Red Bull Racing. Más de un año después se ha vuelto a sentar en el mismo coche que le hizo campeón en 2011: el RB7. Con él ganó once Gran Premios aquella temporada.
Para hacer el regreso a un Fórmula 1 aún más épico, la exhibición se localizó en el mítico circuito de Nürburgring, en Alemania. Tal y como se puede ver en el vídeo superior, Vettel no pierde el amor por la velocidad ni el tacto con el vehículo que le llevó a lo más alto.
Vettel fue el gran invitado para presentar la carrera de resistencia anual que se dará en Nürburgring. Tras la carrera, el piloto alemán confesó sentirse muy feliz de haber vuelto al monoplaza con el que fue campeón. "Obviamente, los coches son un poco más pequeños que ahora, pero también mucho más ligeros y ágiles. Un montón de buenos recuerdos... Es el asiento original; todavía quepo. Estoy muy orgulloso. Aún no he engordado. Fue muy divertido", dijo el piloto.
Además, hizo un llamamiento para el uso de carburantes neutros en emisiones, los mismos que usó para la carrera. "El automovilismo es mi gran pasión y quiero preservar este deporte. Los carburantes pueden producirse sintéticamente y servir de sustituto. Puede que no sea la única solución, pero es parte de la solución. Es importante que todos nos demos cuenta de que tenemos que hacer algo, y lo mejor es que no notas ninguna diferencia en el coche; es igual de divertido." Conluyó diciendo que "Todo encaja hoy aquí, incluido el hecho de que ahora utilizamos combustible sintético, es decir, neutro en emisiones de CO2."