Fernando Alonso llegaba al Gran Premio de Singapur rebajando mucho el suflé. Se hablaba de que el trazado de Marina Bay podía ser muy favorable para el Aston Martin, y las sensaciones no fueron negativas durante los primeros entrenamientos. Sin embargo, poco a poco, las prestaciones iban descendiendo. Pese a salir en una séptima posición donde Alonso podía aspirar a todo, la carrera le llevó por el camino de la amargura.
"Carrera para olvidar. Complicada desde el principio, a ver que tal en Japón". Así de escueto y de rápido despachó a los medios de habla hispana tras la carrera en Singapur. El enfado era patente y la reacción de Alonso es clara: quiere olvidar cuanto antes lo sucedido en Marina Bay. Porque al español le ha pasado absolutamente de todo durante las 62 vueltas de carrera.
El drama de parada de Aston Martin con Alonso en boxes 😱
Qué carrera para OLVIDAR#SingapurDAZNF1 🇸🇬 pic.twitter.com/JJ6o7WPtif
— DAZN España (@DAZN_ES) September 17, 2023
La carrera de Alonso en Marina Bay tiene cuatro puntos a destacar. El primero de ellos, la batalla agónica que tuvo con Checo Pérez para recuperar su séptima posición. Una lucha de la que se aprovechó a las mil maravillas Esteban Ocon. Antes de eso, Alonso ya había sufrido un primer revés. Al entrar para realizar su primera para en boxes, el español se salió de la trazada del pit-lane y la FIA lo sancionó con cinco segundos.
Otro momento clave fue, precisamente, en su segunda parada. Ahí, Alonso estuvo cinco segundo más para cumplir la sanción correspondiente, pero Aston Martin erró con el neumático derecho trasero, retrasando aún más la parada y haciendo perder a Alonso varias posiciones. El último revés lo sufrió al final, yéndose largo en una curva y ronzándose contra el muro. Finalmente, pese a todo ello, pudo terminar: lo hizo en decimoquinta posición.