Las mujeres siguen dando pasos de gigante para algún día poder formar parte de la parrilla de la Fórmula 1. Jessica Hawkins ha sido la última piloto en dejar huella tras subirse al AMR21, el monoplaza de Aston Martin de 2021. Eso sí, sus tiempos en el test no han trascendido, aunque los jefes de la escudería han quedado satisfechos con su rendimiento durante la prueba.
Jessica Hawkins se ha convertido en la primera mujer en subirse en un Fórmula 1 moderno en los últimos cinco años. Había que remontarse hasta 2018 para ver el último ejemplo, cuando la mexicana Tatiana Calderón se subió a un Sauber C32 y un Sauber C37, aunque fue solo en un filming day (día de rodaje con patrocinadores).
Aston Martin le dio la oportunidad a la piloto de las W Series de probar el AMR21 de 2021 durante una jornada de test en Hungaroring. Junto a ella también estuvo el brasileño Felipe Drugovich, actual probador oficial de la escudería británica. La prueba estuvo condicionada por la lluvia aunque la piloto pudo hacer tres tandas.
"Me ha costado sangre, sudor y lágrimas llegar hasta aquí. Cuando oí por primera vez que podía ser una posibilidad, apenas podía creerlo. He tenido que mantenerlo en secreto durante meses. Ha merecido la pena y me ha aportado una experiencia muy valiosa. Llegar a pilotar el AMR21 ha sido un sueño hecho realidad para mí, y un sueño que he estado dispuesta a cumplir durante mucho tiempo", ha comentado Jessica.
La piloto británica ha enfatizado el hecho de que esto sirva para inspirar a otras pilotos: "Seguiré luchando por conseguir más y, en el proceso, quiero inspirar a otras mujeres y hacerles saber que deben perseguir su sueño, sea cual sea".
Mike Crack, jefe de Fernando Alonso, valoró muy positivamente el rendimiento de la piloto: "Trabajó increíblemente duro con nuestro equipo de simuladores y eso hizo que fuera una decisión fácil. Afrontó la oportunidad con gran madurez. Se puso al día rápidamente y encontró un buen ritmo".