El momento en el que Lewis Hamilton pensó en dejarlo todo: "No pensé en continuar"

Lewis Hamilton no ha tenido su mejor temporada en la Fórmula 1. Pese a terminar en tercera posición en la clasificación general de pilotos, el 2023 ha sido su peor año en cuanto a podios obtenidos. El inglés no ha podido plantar cara ante los Red Bull y Mercedes ha ido siempre a contracorriente. Aún así, Hamilton no se plantea abandonar el barco. Su continuidad con la escudería alemana se confirmó hasta el 2025, por lo que seguirá en el Mundial e intentará revertir una crítica situación.

Pero verle tantos años más en la Fórmula 1 pudo no ser una realidad. Sobre todo, tras perder el título en 2021. "Una de las peores cosas que puedes hacer es tomar decisiones basadas en las emociones. Y cuando estás así, normalmente no tomas las mejores decisiones por culpa del calor del momento", confiesa en Motorsport-Total.

Hamilton, en una extensa conversación, habla sobre la presión que tienen los pilotos de Fórmula 1. Todo, en unas temporadas que son muy largas y donde no tienen ni un segundo de descanso. "Es mucha presión. Estoy constantemente bajo observación y estoy en un punto de mi vida en el que no puedo ganar. Además, estás lejos durante mucho tiempo. He estado haciendo esto durante 16 años y es agotador. Hay mucho brillo y glamour y una hay mucha positividad, pero no es nada fácil dar lo mejor de ti", añade el inglés.

Lewis Hamilton y su confesión más sincera

Pese a que ahora no quiere tirar la toalla y remontar la situación, Hamilton confiesa que en 2021 tuvo muchas dudas. "Durante ese tiempo tras Abu Dhabi, pasaban por mi cabeza muchas cosas. Fue un momento realmente difícil y tuve que esperar a que las cosas se calmaran para poder pensar con claridad y tomar las decisiones correctas. En ese momento definitivamente no pensé que iba a continuar", explica.

"En este momento de la vida, todo lo que puedo hacer es perder, y ciertamente hubo un momento en el que me pregunté si quería pasar por esto o no", reflexiona Hamilton. Y es que la presión de un Campeón como el inglés, es una de las cosas más complicadas de gestionar.