Fernando Alonso sigue sin aclarar su futuro. El piloto español encara un 2024 ilusionante con Aston Martin, pero con la incertidumbre de saber qué pasará el año que viene. Con el baile de asientos que empezaron Lewis Hamilton y Ferrari, se prevén muchos cambios. Y uno de ellos podría ser el del mencionado Alonso. Aston Martin va a luchar por retener al asturiano. Renovarle por varios años más está en la lista de deseos de Lawrence Stroll y compañía, pero la opción de recalar en Mercedes es muy tentador.
Sobre ello, George Russell tiene una opinión muy clara. Igual que Toto Wolff, el jefe del equipo alemán. "Lo ideal es tener buena armonía entre los pilotos. Pero bueno, opine lo que opine, las decisiones las toma Toto y la dirección. Aunque eso sí, nos hemos divertido mucho con la tremenda cantidad de mensajes que nos han saltado en el teléfono. En todo caso, es una buena oportunidad para el equipo", destacaba el propio Russell en un encuentro con la prensa en Bahréin.
"Nos quedan unos interesantes meses por delante la verdad. Pero creo que después de haber tenido al más grande a mi lado, a un siete veces campeón del mundo, no me importa mucho quien venga. Así que como he estado en esa posición, sea como sea, un piloto experimentado o uno más joven, me veo en una gran situación, después de todos estos años, para empujar el equipo en el próximo capítulo", añadía el piloto inglés de Mercedes.
Todo, ante la atenta mirada de un Fernando Alonso que podría recalar al otro lado del box de Russell. El asturiano, además, aprovechó para lanzar una pullita a Hamilton. "Bueno, el límite presupuestario son 130 ó 140", recordó el de Mercedes. "Bueno, algunas cosas quedan fuera, como esos sueldos, y en el caso de Mercedes seguro por el sueldo de tu compañero", respondía Alonso. "No sé el coste extra de tener el segundo coche en la pista, pero vamos, que corremos aquí en una semana, ya tenemos los dos coches listos más o menos, y teniendo los dos monoplazas, tres o cuatro días, debería ser lo mínimo para un deporte profesional", apuntaba Alonso.