La astucia de Carlos Sainz y Lewis Hamilton para salvar a una marmota: el animal casi termina atropellado

No es la primera vez que los animales hacen acto de presencia en diferentes trazados del Mundial. Ya sea de F1 o de MotoGP. Y tampoco es la primera vez que Carlos Sainz se encuentra con una marmota en Canadá. Durante la disputa de los segundo entrenamientos libres del Gran Premio que se lleva a cabo en Montreal, una crítica situación estuvo muy cerca sucederse. El piloto español de Ferrari y Lewis Hamilton tuvieron que tirar de destreza al volante para no atropellar a una marmota que intentaba cruzar el trazado. Por suerte para todos los implicados, el momento quedó en una simple curiosidad que puede repetirse durante lo que resta de fin de semana.

"Sí, en días como hoy siempre se pueden aprender cosas. Para mí, se trató más de relacionar la intensidad de la lluvia con la pista, lo seca o húmeda que estaba, qué neumático era el adecuado en cada momento, lo que será un aprendizaje útil porque parece que el resto del fin de semana podría tener condiciones muy similares. Más que intentar marcar un tiempo de vuelta, traté de sentir el coche en diferentes condiciones, con diferentes neumáticos y ver, cuando llegue la clasificación del sábado y la carrera del domingo, cuál será el neumático adecuado en el momento adecuado", analizaba Sainz sobre sus primeras sensaciones en Canadá.

Carlos Sainz y Lewis Hamilton, al borde de la tragédia

Se trataba de la FP2 de este viernes. Con unas condiciones climatológicas algo complicadas, Sainz y Hamilton tuvieron la suerte de salvar un momento crucial para varias partes. Al principio parecía que la acción por parte del piloto español era crítica. Un frenazo incoherente que perjudicaba claramente al monoplaza que tenía justo detrás, en ese caso Hamilton.

Pero las repeticiones en seguida dejaron constancia de todo lo sucedido. En la chicane, antes de entrar en la recta de meta, una marmota tuvo la genial idea de acercarse lo máximo al 'Gran Circo'. Vivir la experiencia de la Fórmula 1 lo más intensamente posible. Tanto fue así, que Sainz se vio obligado a tirar de astucia para no llevarse al animal por delante; Hamilton, justo detrás, hizo lo mismo.