Marc Márquez baja el suflé pese a estar en la Q2: "Ritmo no hay"

Marc Márquez terminó la jornada de viernes con buenas sensaciones. Lo hizo entre los diez primeros, logrando un hueco para la Q2 de este sábado y con un discurso muy cauteloso. Pese a que los números de Márquez son positivos por lo apuntado anteriormente, el catalán es muy cauto. Sabe que estar en Q2 puede ser un espejismo y que las situaciones en carrera serán muy complicadas. Además, reconoce no tener un ritmo competitivo para estar luchando por algo más que no sea rascar algún punto.

"No, ritmo no hay. En la sprint veremos qué ritmo tenemos, pero la pista va mejorando muchísimo y la clave del fin de semana será irse adaptando. Por ejemplo, esta mañana, a nivel de electrónica era una cosa; por la tarde era otra. Será adaptarse porque el asfalto tiene mucho agarre, pero a medida que se va limpiando y cogiendo goma. La parte sucia, está muy sucia", reconocía el propio Márquez en Losail.

Marc Márquez es realista y sabe que no está para tirar cohetes

"Ha sido una buena tarde. En el segundo entrenamiento, antes del intento a una vuelta, he puesto el neumático duro atrás y delante y, solo, he hecho una buena vuelta y me he dicho: 'Si me busco la vida, puedo'. Tenía la sensación. Entonces, me he buscado la vida, he buscado ese rebufo de Pecco, porque sabía que era uno de los más rápidos en pista. De hecho, estábamos Pecco, yo y Joan detrás y creo que alguno más. Pero luego lo tienes que hacer y lo hemos hecho. La verdad es que estoy contento porque esa Q2 este año se nos está resistiendo mucho", resumía el piloto catalán.

Un Márquez que está viviendo sus últimos momentos con los colores del Repsol Honda. Aún así, él se muestra muy centrado en cuajar un buen fin de semana y ya tiene claro cuál es su objetivo para la clasificación de este sábado. "Si mejoramos un par de cosas y hacemos una buena elección de neumáticos, tanto delantero como trasero, creo que podremos estar en el 'top 10', pero no más".