Uno de los mayores retos que tiene Marc Márquez durante el 2024 es adaptarse a la Ducati y luchar en condiciones desfavorables. Porque el piloto catalán disputará la temporada con el Gresini Racing, pero lo hará con la moto que este último curso han llevado Jorge Martín o Pecco Bagnaia. Es decir, correrá con el prototipo antiguo. Pese a que las prestaciones de la moto son muy destacables, el desarrollo en la fábrica italiana sigue su curso. Y lo hacen con el objetivo de dar a los 'primeras espadas' una herramienta ganadora. En esa tesitura estarán los pilotos de Ducati Lenovo y del Pramac Ducati.
Fuera de esa ecuación se encuentran Álex y Marc Márquez. Era algo que ya se sabía al firmar con Gresini, pero ya es una completa realidad. Davide Barana, el director técnico de Ducati, ha afirmado en el Marca que la moto del 2024 para los pilotos oficiales tiene mejoras en el motor. "Tendremos un motor mejor, con un poco más de potencia. Obviamente, después de diez años de un reglamento estable, es siempre difícil encontrar algún caballo más. Pero cada año lo intentamos y este año hemos logrado un buen conjunto de prestaciones", explica.
Esto último confirma lo que ya se esperaba: la moto de los hermanos Márquez será peor. Dentro de los parámetros que cabía esperar, no debe alarmar a nadie. Y el claro ejemplo es Álex Márquez: con el prototipo del 2022 logró ganar una sprint y luchar por varios podios. Aún así, desde Ducati avisan.
"La diferencia será visible. No hay que pensar en que sea una cosa que no se ha visto nunca, pero las diferencias son bastante claras. En las simulaciones, sobre el papel, nos da buenos resultados y hay que confirmarlo en pista por los pilotos, a nivel de sensaciones. También con las medidas, que tomaremos con la pista", dice Barana en relación al paso adelante de la Ducati 2023 a la 2024.