Antonio Soto
Madrid, 29 ago .- A pesar de su obligada renovación, España aspira a despejar dudas y seguir engrandeciendo su palmarés en el Mundial de China que se presenta como el más abierto de los últimos tiempos, sin olvidarse de que los dos primeros equipos europeos lograrán su billete para los Juegos Olímpicos de Tokio.
Con un Estados Unidos más 'terrenal' debido a las renuncias y bajas de sus máximas figuras, aunque mantiene el cartel de favorito, la pelea por las medallas se prevé dura por el nivel de selecciones de la talla de Serbia, Francia, Argentina o Grecia.
Por primera vez en muchos años no habrá ninguno de los "juniors de oro" en un combinado nacional que se quedó muy pronto sin su líder, Pau Gasol, por una inoportuna lesión, y del que se bajaron por motivos personales los NBA Nikola Mirotic y Serge Ibaka o Sergio Rodríguez.
Cinco jugadores se mantienen del Mundial disputado en España en 2014 -Sergio Llull, Rudy Fernández, Ricky Rubio, Víctor Claver y Marc Gasol- y del resto la base la forman hombres que colaboraron activamente en las ventanas FIBA de clasificación.
En esta ocasión, serán cuatro los representantes de la NBA en la selección de Sergio Scariolo: Ricky Rubio (Phoenix Suns), Marc Gasol (Toronto Raptors), Willy Hernangómez (Charlotte Hornets) y su hermano Juancho (Denver Nuggets).
De una primera selección de dieciséis jugadores, el italiano descartó en un primer momento a Pablo Aguilar y Joan Sastre y el 21 de agosto comunicó a Jaime Fernández e Ilimane Diop que no contaba con ellos y anunció la lista definitiva con los doce que jugarán el Mundial.
"Nuestra mayor presión es estar a la altura de nuestra historia. Todos aquí hemos tenido la suerte de hacer grandes cosas con la selección y lo primero es estar a la altura de lo que hemos contribuido a crear", dijo el seleccionador durante la presentación de la gira de preparación.
La selección española ha quedado encuadrada en el Grupo C, con sede en la ciudad de Guangzhou. Debutará frente a Túnez el 31 de agosto, se medirá a Puerto Rico el 2 de septiembre y cerrará la primera fase frente a Irán dos días después.
Los dos mejores equipos se clasificarán para la segunda fase, donde previsiblemente los rivales serían la potente Serbia o la impredecible selección de Italia y para la que los clasificados arrastrarán los resultados de los tres primeros partidos.
Preguntado por los objetivos con los que viaja a China, Sergio Scariolo dijo en una entrevista con la Agencia Efe que su meta era "competir" y regresar a casa con la sensación de haber llegado al límite de las posibilidades.
España llega a China tras cinco partidos de preparación en los que ha sumado cuatro victorias y una solo derrota, ante Estados Unidos en California en un partido en el que plantó cara a los vigentes campeones.