Un médico explica por qué es un error grave comparar gripe y coronavirus

En estos días se produce continuamente una comparación: mortalidad entre gripe común y coronavirus. Las cifras pueden resultar engañosas, puesto que podría parecer que la gripe es mucho más letal y, a pesar de ello, no ocupa tantos titulares. Pero ¿es esto realmente así?

Si uno mira los números ofrecidos por el CIBER de Epidemiología y Salud Pública (Ciberesp) y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), la temporada 2017-2018 de gripe dejó estos valores: 800.000 afectados, 52.000 hospitalizados y 15.000 fallecidos.

A priori, estos datos llevarían a muchas personas a preguntarse por qué es entonces más peligrosa y llamativa la epidemia de coronavirus —que, a 26 de marzo se acerca a los 4.500 muertos en España— que la de la gripe común, que en la temporada 2017-2018 causó 15.000 víctimas.

El doctor Pablo Muñoz-Cariñanos de la Sotilla explica que existen dos factores por los que no se pueden comparar ambos virus: contagiosidad y mortalidad.

El coronavirus es mucho más contagioso que la gripe común. Esta última tiene un factor 1,3 mientras que la enfermedad importada de China arroja un múltiplo de 3. Eso quiere decir diez afectados por gripe la transmitirían a 13 personas, mientras que 10 afectados por coronavirus, a 30.

Por si este dato no fuera ya preocupante, la mortalidad es muy superior: treinta veces peor en el caso de la nueva pandemia. Con la gripe estacional de cada año muere, aproximadamente, el 0,3% de los afectados; en caso del coronavirus las cifras están entre el 2 y el 4%.

Con ese factor de contagio tan grande se produce un efecto colateral inmediato: se saturan los hospitales. No existe capacidad para atender a tantos pacientes ni para asegurar que no siga expandiéndose el virus.

El resto lo provoca, por desgracia, la alta tasa de mortalidad.

Al mezclar los dos factores obtenemos la situación actual de escasez de medios, especialistas afectados en una tasa muy preocupante y una curva de infectados y fallecidos que en estas dos primeras semanas está resultando desoladora.

No obstante, desde el Ministerio de Sanidad afirman que el pico de contagiados está próximo a alcanzarse. Esto sería una gran noticia que permitiría situar en un horizonte de un mes una situación como la que se empieza a vivir en China, donde las cuarentenas ya se han levantado casi por completo.