El temporal ‘Filomena’ ha vuelto a poner una cuestión sobre la mesa: ¿Pagamos demasiado por la factura de la luz? La primera respuesta que nos viene a la mente es “sí”. Y puede que lleves días pensando en dar el paso y cambiar de compañía. Sin embargo, debes andar con ojo. Ni todo lo malo es tanto como lo pintan, ni las alternativas son la panacea de la factura de la luz.
Vayamos por partes. Puede ser que tengas contratada una tarifa PVPC. Si es así, tu factura en enero habrá subido, como mínimo, unos 10 euros respecto a la del mes anterior. Esto es debido al aumento de la demanda de electricidad provocada por las bajas temperaturas.
Sin embargo, del mismo modo que al subir la demanda sube el precio, en los próximos meses verás de nuevo reducida tu factura. Te beneficiarás de las fluctuaciones del precio por kWh.
Algo que no podrás hacer si cambias de compañía y escoges una tarifa plana. Porque la tarifa plana te permite pagar menos cuando los precios suben. Pero cuando estos bajan, tu tarifa queda congelada, con lo que no puedes beneficiarte de los descensos de precios.
Por eso, antes de dar el paso, es interesante conocer qué ofrece cada una de las compañías y que pago nos implicará a final de mes. Y es que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), 1 de cada 4 tarifas con precio fijo acaban siendo más caras de lo que han tenido que pagar los que están sujetos a tarifas PVPC. Y es que acabarás pagando siempre el mismo precio, pese a que el temporal ‘Filomena’ haya pasado.
La institución, en este sentido, recomienda revisar las facturas con asiduidad, de forma que podamos compararlas con otras disponibles en el mercado. Y es que del mismo modo que 1 de cada 4 es más cara, las hay de muy económicas y que se adaptan perfectamente a tus necesidades.
Y para que no te equivoques en tu decisión, la OCU dispone en su página web un comparador en el que podrás encontrar cuál es la mejor tarifa que puedes contratar según tu consumo. Lo encontrarás en este enlace.