La juventud de hoy en día no es muy dada a coser, sin embargo las personas mayores aún guardan ese punto de tradición. Es una de las cosas más antiguas en las tareas del hogar. Hacer un zurcido en el roto de un pantalón. Antiguamente eran muchos de familia y la ropa duraba más, pasaba de un hijo a otro. Sin embargo, con la llegada de la globalización (la tecnología nos ha hecho la vida más fácil) y el abaratamiento de las prendas de ropa, ya nadie se preocupa en arreglar la vieja. Cada vez es mucho más difícil encontrar a un joven con dominio en este arte.
Cadenas como Lidl, donde puedes encontrar todo tipo de productos más allá de alimentación, han querido ponerles la vida mucho más fácil a aquellos jóvenes sin idea de coser. De momento, ya han empezado a comercializar artículos con los que poder renovar fácilmente los botones de un abrigo, camisa o pantalón. No queremos desmerecer a los abuelos y abuelas de antaño, pero ya no hacen falta sus consejos, por lo menos para esto.
Es una pinza con accesorios intercambiables que permite cambiar cualquier botón con suma facilidad. Cuenta con un muelle y tiene un aspecto similar al de una grapadora. El set también incorpora cuatro sellos para botones a presión en distintos tamaños.
Y cómo no, con su precio competitivo que no llega ni a los 10 euros, viene en el mismo set hasta 80 botones de diferentes colores.