Carolina Ruiz, 35ª en el Super-G de Beaver Creek de esquí
Después del buen sabor de boca que le dejó el Super-G de Copa del Mundo en Lake Louise, la esquiadora Carolina Ruiz afrontaba el miércoles con ánimo el de Beaver Creek, que sustituía al que debía disputarse en la estación francesa de Val d’Isere pero que, a causa de la falta de nieve, tuvo que ser trasladada.
Ruiz, que en octubre cumplió 30 años, salió con el dorsal 6 y, tras empezar muy bien la primera parte del recorrido (14s38 en el primer parcial y 35s48 en el segundo, a menos de un segundo de la suiza Martina Schild, que lideraba en ese momento tras una gran bajada), no obstante, la andaluza acabó con un tiempo de 1m14s36, que la clasificó en la 35ª posición, a 3s68 de la vencedora.
El Super-G se corrió en la pista Golden Eagle con un recorrido de 1.940 metros, 520 m de desnivel y 39 puertas a negociar. La temperatura era de -10º C, aunque a pleno sol y un ligero viento, más o menos las mismas condiciones que en Lake Louise. Como allí, de nuevo Lindsey Vonn volvió a ser la ganadora, encadenando así cuatro victorias consecutivas en la Copa del Mundo. La estadounidense está que se sale en este inicio de temporada y encabeza las clasificaciones de las pruebas de velocidad con un dominio insultante. En Beaver Creek salió con el dorsal 17 y arrasó de nuevo: 14s19 en el primer parcial, 34s08 en el segundo y 51s50 en el tercero, a una velocidad de 102 km/h para llegar vencedora en 1m10s68. De esta manera superó a la suiza Fabianne Suter (a 37 centésimas) y a la austriaca Anna Fenninger (a 41).