Juan Antonio juega al balonmano desde los 7 años y desde hace 3 se decidió a hacer un curso de árbitro en Huelva. “Me apunté porque me llamó la atención y ahora lo compagino sin problemas. Llevo tres años pitando en categoría provincial a equipos de todas las categorías, de benjamines a seniors de pueblos como Nerva, Valverde, Lepe y Moguer”, reseñó el moguereño, que explicó sobre su situación que “no puedo ascender a territorial porque tengo ficha en esa categoría como jugador y no puedo tener a la vez ficha de árbitro”.
Sueños con un uniforme y otro
“Ahora mismo me centro en entrenar y jugar lo máximo. Sueño con asentarme en el equipo, ayudar a que logremos el ascenso y jugar en la División de Honor Plata. Cuando se está cerca de los 30 hay que ser muy buen jugador para continuar en activo a ese nivel y para entonces me dedicaré más al arbitraje”, explicó, a lo que agregó que “si dejara de jugar si ascendería de categoría, pero ahora mismo prefiero progresar como jugador, porque es el momento. Son los años más bonitos y algún día espero tener más proyección al arbitraje”.
Como colegiado asegura que “mi sueño es arbitrar en categoría nacional y llegar a la Asobal, pero con llegar a la categoría en la que juega el PAN ya me daría por contento, aunque hay que hacer muchos méritos para llegar”.
Juan Antonio señaló que como jugador a veces piensa como árbitro cuando está sobre la pista y analiza las decisiones de los colegiados, pero que prefiere ser prudente. “Hay veces que lo pienso mucho, porque cuando arbitro también tengo equivocaciones, pero hace tiempo que decidí callarme la boca, porque los arbitros son los que tienen la sartén por el mango y hay que aprender a aceptar las decisiones que toman y seguir jugando”. Es por ello que dijo que “como arbitro no quiero que me protesten mucho, así que no soy nada protestón cuando juego. Cuando un jugador te da mucho la tabarra al final lo tienes que poner en su sitio”, señaló.
Jugar analizando al árbitro
De su experiencia en estos años de árbitro comentó que “en Huelva no he tenido muchos problemas hasta ahora. Conozco a todos los jugadores y técnicos, tengo amistad con muchos de ellos, me respetan y nos llevamos bien. Este verano he estado arbitrando muchos torneos por toda España y fuera sí te protestan más”.
Acerca del arbitraje que ha recibido en este 2011 e equipo, manifestó que “la situación está mejorando bastante. La plantilla decidió no protestar tanto y ser más respetuosa con los árbitros, porque tenemos fama de duros y guerrilleros. Estamos en el punto de mira, pero poco a poco se va suavizando tras lo que pasó en la fase, que aún nos escuece, y hay que saber llevarlo y jugar los partidos”.
De todo menos de espectador
El canterano amarillo también ha ocupado un lugar en la mesa arbitral durante los partidos del Pedro Alonso Niño, muchos antes de llegar al primer equipo. “En la mesa he estado muchos partidos, aunque últimamente menos porque como he ido convocado no he podido. Ahí soy imparcial y tengo claro que soy como un árbitro y tengo que responder al colegiado del partido. No me cuesta trabajo desempeñar este papel”, aclaró Domínguez, que tiene muy claro el rol que prefiere evitar. “Como espectador no me gusta tanto porque no me controlo cuando veo lo que pasa. Prefiero estar en la dinámica del equipo, tanto en la pista como en el banquillo, o en la mesa, porque como espectador muchas veces no sabes lo que dices por la tensión y la impotencia”, aseguró.
Esta semana Juan Antonio ha vuelto a ser uno más de la plantilla a las órdenes del técnico José Flores y tras la sesión de esta mañana volverá a disfrutar de tres días libres antes de regresar el lunes para preparar el primer encuentro del año 2012 ante el Guanches SJO Lanzarote (sábado 14 de enero, 20.00 horas, Pabellón Zenobia).
La idea es continuar en este encuentro con la excelente línea de juego descrita en la liga. “La primera vuelta del equipo ha sido espectacular, fantástica. No hay adjetivos para describirla. El equipo ha trabajado muy bien y ha sabido llevar las sistuaciones difíciles que han surgido en los partidos, por lo que han ido llegando los resultados a favor”, indicó el joven jugador que sobre su último tanto ante la Nava dijo que “el gol fue una alegría tremenda y estoy contento por haber aportado al equipo”.
De su situación personal destacó que “siempre se evoluciona si se trabaja y esta es mi segunda temporada con el primer equipo. El entrenar cada día con jugadores mejores que tú y con más experiencia me ha ayudado mucho y la evolución que he tenido se nota”. Además consideró que “el que juegue más o menos es decisión del entrenador. Ahora mismo no es que esté jugando mucho, pero soy un jugador joven e inexperto y muchas veces se dan finales de partidos complicados que necesitan de gente veterana. Pero estoy contento con mi situación y busco seguir entrenando bien y aprovechar las oportunidades que tenga tanto con el primer equipo como con el filial”.