La ronda hispalense queda este año reducida a dos etapas ante las dificultades económicas, aunque logra sobrevivir a la terrible coyuntura actual con intención de recuperar su esplendor en el futuro. Se celebrarán, pues, dos jornadas: el sábado 21 se disputará, con salida y meta en Dos Hermanas, la X Clásica de Santa Ana; y el domingo 22, la XIII Clásica Velá de Triana, que parte y llega a la capital hispalense y que este año recupera la Plaza del Altozano como punto de salida y meta.
A pesar de las estrecheces, está garantizada una excelente participación, ya que en la preinscripción figuran nueve equipos, seis de ellos entre los quince mejores del ranking nacional en la categoría élite y sub 23, a saber: el Azysa-Telco’m-Conor WRC (1) navarro, el GSport-València TerraiMar (5), el Andalucía (7), el UPV-Bancaja (12), el Extremadura-Spiuk (13) y el Cajamar-Cosentino almeriense (15).
Completan el cartel de la Vuelta a Sevilla el ControlPack-UC La Senia catalán, el Caromar-PC Galán Reyes de Sanlúcar de Barrameda y el conjunto portugués Louletano, que otorga carácter internacional a la participación.
Entre los corredores seleccionados por sus equipos hay exprofesionales como Arkaitz Durán (Azysa), Esteban Plaza (Andalucía), Darío Gadeo y Antonio Miguel (UPV), el argentino Jorge Martín Montenegro y el sevillano Antonio Olmo (Louletano), entre otros, junto a algunos de los ciclistas más destacados de la temporada, caso de Andrés Vigil, Adrián López y Javier Cantero (Andalucía), el holandés Mike Terpstra, Kepa Vallejo y el argentino Ariel Sívori (Azysa), los chilenos Adrián Alvarado y Edison Bravo (Extremadura), José Belda y Vicente García de Mateos (GSport-València).
Como en ediciones anteriores, un pelotón de lujo que sin duda protagonizará estos dos días del mejor ciclismo por las carreteras de la provincia.