En este caso, la multitudinaria y preciada cita de la entidad hispalense, por la gran cantidad de agasajados y la importancia de sus éxitos, ha tenido una protagonista indiscutible en la figura de la campeona olímpica Marina Alabáu, mejor deportista de la sección de vela por su histórica medalla de oro en Londres 2012 en la clase RS:X.
La windsurfista ha visto reconocido su hito por parte del Náutico dando nombre a la Escuela de vela de la entidad, de la que surgió, que ha colocado una placa conmemorativa. Este ha sido el momento culminante de una velada en la que Alabáu, que también lograba el año pasado los títulos de campeona europea de RS:X y mundial de RS:One, compartía protagonismo con la remera olímpica Camila Vargas, natural de El Salvador pero formada en el Guadalquivir y que en Londres tomaba parte en sus segundos Juegos, por lo que se llevaba el premio a la deportista más destacada de su sección; o Curro Manchón, que al margen de sus resultados como regatista lograba en la cita británica del pasado verano la medalla de plata como técnico de la finlandesa Tuuli Petaja en la misma clase RS:X.
El piragüista internacional y campeón de España Moshine Moutahir, el nadador Octavio Acosta, subcampeón de España; y la jugadora de baloncesto Rocío Thiriet, campeona con el Náutico en Primera Nacional, completaron la relación de mejores deportistas en una VIII Fiesta del Deporte que tuvo otro momento álgido con la entrega del Premio a la trayectoria. En esta ocasión, reconociendo toda una carrera como ejemplo de entrega y dedicación, la agasajada era la exnadadora Maite Trueba, internacional en 77 ocasiones y siete veces campeona de España, cuatro de ellas a nivel absoluto. El Premio Andalucía de los Deportes 1990, su participación en los Mundiales de Roma 90, el hecho de ser la primera nadadora andaluza en proclamarse campeona nacional o las medallas de oro, plata y bronce de la Real Federación Española avalan también el reconocimiento a esta especialista en espalda que desarrolló prácticamente toda su carrera en el Náutico antes de disfrutar de una beca en la American University de Washington.
Mª Dolores Blanco-Morales, en calidad de presidenta del Náutico, se encargaba de poner el cierre a un evento en el que también eran reconocidos los deportistas del Náutico con logros tanto regionales como nacionales e internacionales, un total de 71, al margen de los anteriormente citados.
"De todos ellos el Club Náutico se siente enormemente orgulloso, por supuesto por los éxitos deportivos obtenidos que han colocado al deporte español, sevillano y al Náutico en la élite del deporte internacional y que nos han convertido, junto con los que les precedieron, en todo un referente de excelencia en la formación y en la práctica deportiva.
Pero no solo nos sentimos orgullosos de los éxitos obtenidos, también, y no en segundo lugar, por los valores humanos que transmiten y representan cada uno de nuestros deportistas.
Como el lunes mismo escuchaba de Marina Alabáu, en el homenaje que le tributó su pueblo (Mairena del Aljarafe), llegar a ser deportista de elite supone ante todo mucho sacrificio, esfuerzo, tesón, ilusión y entrega; y sé que parte de estos valores los has aprendido en el Club Náutico. Valoraste todos los apoyos recibidos, sobre todo de tus familiares y amigos, sin olvidar a tu club y al resto de entidades deportivas. Gracias, Marina, por las palabras tan cariñosas que nos has dedicado en todas tus intervenciones. Gracias, por llevarnos en el corazón y que nos recuerdes como un pilar en tu formación deportiva. Y gracias por visitarnos cuantas veces te lo hemos pedido, a pesar del año tan lógicamente ajetreado que llevas. Para mí personalmente es un honor tenerte a ti y a tu hermana entre la familia Náutica y que nuestras instalaciones de vela lleven para siempre tu nombre.
Es el momento de agradecer el trabajo realizado por todos los que forman la gran familia deportiva de nuestro club, tan numerosa e importante, como bien hemos podido comprobar ahora: socios, deportistas, técnicos y familiares. Sin el sacrificio, la dedicación e ilusión de cada uno de ellos no sería posible nada de lo que estamos celebrando esta noche.
No quiero terminar este acto sin recordar algo que parece que hay que estar recordando continuamente para no olvidar quiénes somos y por qué seguimos aquí. A lo largo de sus 60 años de historia, el Náutico se ha caracterizado por formar y acercar el deporte de competición en sus cinco disciplinas a todo aquel que ha querido practicarlo, fuera o no socio del Club, sin distinciones sociales ni de otra índole. Esa es la razón de ser del Club, por ella nos destacamos y nos reconocen, como una institución que no sólo está cerrada a sus socios, sino que se precia de tener vocación de servir de utilidad a Sevilla, promocionando el deporte y defendiendo su río.
Esta Junta Directiva que presido desde luego que va a seguir con esta labor heredada. Son tiempos difíciles, pero en la medida de nuestras posibilidades nos comprometemos a llevar adelante el nombre del Club Náutico como referente del deporte de base y competición, en nuestra ciudad y por todo el mundo".