La Platea de Juanma G. Anes
(Huelva Información)
En más de una ocasión, Manolo Sanchís (hijo) ha contado con gracia cómo cada vez que discutía con su padre de fútbol hasta altas horas de la madrugada, cuando su progenitor se veía sin salida en la pugna dialéctica le terminaba preguntando a su vástago para zanjar la discusión: “¿pero tú cuántas Copas de Europa has ganado?”. Y el hijo, que hasta 1998 no tenía ni media ‘orejuda’, asegura que “llegados a ese punto, como no podía superarle, me callaba y me retiraba sin rechistar”. Claro que, poco después, la vitrina del menor de los Sanchís cambiaría. Y el final de las discusiones imagino que también…
Pues aquí, parecido. Si habláramos de lo puramente futbolístico con Sergi –lo único que me interesa, sus hábitos y su residencia no es cuestión de nadie más que de él-, quizás podría terminar requiriéndonos que le enseñáramos nuestro palmarés futbolístico. Y creo que competir con quien ha jugado 500 partidos en Primera, en el Barcelona y en Atlético, que tiene en sus piernas un par de Mundiales y de Eurocopas, tres Ligas y otros grandes logros, fácil no debe ser, digo yo. De momento, él no lo hace. Por ahí nos libramos.
Porque si él se defendiera como lo hacía ‘Sanchís padre’, a mí me fulminaba, es evidente. Pero, en cuanto a lo que supone discutir sobre sentido común, igual hasta le podría plantar resistencia, ya que entre el maravilloso tiki-taka que yo adoro y el tedioso gili-toke (con perdón) que a veces se ve hay un buen trecho. Porque entre enviar a sus jugadores algunos mensajes de refuerzo en ciertos ‘post-partidos’ y lo que capta la afición, los beneficios menguan. Y porque él lleva poco tiempo en ‘Huelva y sus circunstancias’, que diría Ortega. Le honra el reconocimiento público de posibles errores. A partir de agosto, ojalá nos calle a muchos por lo que se ve en el campo. Yo cerraré el pico encantado.