El primero, subcampeón olímpico el pasado año en los Juegos de Londres como técnico de la finlandesa Tuuli Petaja, regresa a la actividad competitiva en primera persona para hacer un receso en la preparación de su hermana, a la que dirige en el ciclo olímpico rumbo a Río 2016.
A sus 33 años, Curro Manchón acude al embalse de Nove Mlyny, escenario de la cita mundialista, dispuesto a reeditar éxitos en la categoría de ligeros. Sin ir más lejos, el que fuera campeón mundial en 2003 y 2005, además de subcampeón en el año 2000, se ha subido al podio en dos de las tres últimas citas intercontinentales de la clase Raceboard, siendo tercero en 2010 y subcampeón en 2011. Además, en el Europeo de 2013 ocupaba la cuarta plaza.
Por su parte, su padre, Francisco Manchón se presenta en el Mundial con el objetivo de aumentar un palmarés que incluye tres coronas de veteranos en la clase Raceboard, la última el pasado junio en las aguas italianas del Golfo de Trieste. En este caso acude a tierras checas al ampliarse la participación de la cita absoluta a los Masters, lo que también aprovecha su mujer, la pentacampeona mundial Mª Antonia Domínguez, madre de Curro y Blanca Manchón. Anto, como es conocida en el mundo de la vela, también se imponía entre las féminas en el Mundial de veteranos de hace dos meses y medio, logrando posteriormente el primer puesto de su categoría en los Juegos Mundiales Masters de Torino.
Un total de 112 regatistas procedentes de 14 países y cuatro continentes se dan cita durante toda la semana en tierras checas para disputar el Campeonato del Mundo absoluto de la clase Raceboard, también abierto a la categoría Master, para veteranos.
Los dos últimos campeones mundiales, el polaco Maksymilian Wojcik y el eslovaco Patrik Pollak, se han dado cita en Pavlov, donde en teoría parten como favoritos los especialistas en vientos ligeros. Y es que la competición, en cuyas primeras jornadas la flota se dividirá en dos grupos rumbo a las series finales, se disputa en un embalse.