El penúltimo cuento

La Platea de Juanma G. Anes
(Huelva Información)



El simulacro de partido ante el Numancia lo hemos visto demasiadas veces en los últimos años. Fue tan desangelado todo, desde el frío ambiente en la grada (salvo los de siempre) hasta que pasaran como aviones los sorianos por el césped, que da auténtico pavor pensar que lo poquito que se había avanzado se empieza a ir por el desagüe sin un tapón a la medida que lo evite. Mirando a Oltra y a la plantilla uno cree que hay motivos para no pensar en otro batacazo como el que se firmó el pasado curso. Pero…
…Pero cualquiera sabe, porque lo extradeportivo puede con todo. No es que el equipo, por su cortedad, esté cogido con pinzas, es que cualquier día nos quedamos sin pinzas para coger al equipo. Lo de luchar por el ascenso es ya hasta secundario; hay una ola que no para de crecer y amenaza con engullir a todo el que se pone por delante y se ve que no hay marinero que la gobierne por mucha llamada a la calma que se proclame. Lo de los retrasos en los pagos en los salarios de jugadores del primer plantel y, sobre todo, del resto de empleados del club es demasiado serio, así que desde aquí el mayor de los reconocimientos hacia todos ellos y su enorme esfuerzo. Ya hemos dicho en esta ‘platea’ en muchas ocasiones que más importante que el Recre esté en tal o cual categoría es que cree una identidad real con los suyos y que siga siendo el Recre durante muchos años más, pero los indicios que da Hacienda no son halagüeños. Ojalá nos equivoquemos.  
Ya empiezo a oír que el Decano y su supervivencia puede convertirse en el ‘tema estrella’ de las próximas elecciones municipales. Pues entre los unos, los otros y los que prometen ir a la Luna sin cohete vamos apañados… Menos salvadores y menos recreativistas de palmaditas en el pecho y de lágrima fácil, por favor. Que ese cuento, y su final, también nos los sabemos todos.