Paco Aurioles, técnico del Clínicas Rincón, ha sido uno de los artífices de la permanencia del Clínicas. Tras ganar al Oviedo para culminar una tanda de tres victorias consecutivas, el malagueño estaba exultante. "Sabíamos lo que nos jugábamos, con la permanencia en el horizonte y contra un equipo que se juega el play off. Teníamos claro que iba a ser muy difícil. Oviedo hace muy buen baloncesto, con grandes jugadores muy versátiles. Hemos salido desajustados al principio, pero hemos hecho un segundo cuarto de los mejores de este equipo", explicó Aurioles.
Para Aurioles, una de las claves de la victoria estuvo en que "las dificultades que les pusimos durante el partido las hemos aprovechado, con un segundo cuarto de Ricardo excepcional. Hemos estado concentrados y por eso nos fuimos al descanso con una buena renta de 14 puntos". A pesar de que el equipo dio un bajón en el tercer cuarto, luego se recompuso y siguió remando hasta el final para sellar el objetivo. "Cuando queda menos tiempo vienen los nervios y la tensión, que hizo que pecáramos en algunas situaciones. Pero, al último cuarto hemos llegado bien, con opciones en los últimos minutos a pesar de los desaciertos en los tiros libres".
Sobre lo que mostraron sus jugadores sobre la pista, Aurioles fue claro a la hora de señalar que "no le puedo poner ningún pero a este equipo. Era muy difícil jugar este partido, sobre todo por el ambiente generado en el segundo cuarto. Ellos han tenido mala suerte con la lesión de sus jugadores interiores y han tenido que jugar muchos minutos con los pequeños, que nos han puesto muchísimos problemas. No veo nada negativo hoy, porque lo principal era sacar la victoria y que los jugadores siguieran creyendo en su trabajo. Queremos terminar bien la temporada y quedarnos con buen sabor de boca".
El nombre del partido fue Ricardo Guillén, que anotó 41 puntos para hacer 51 de valoración y coronarse una vez más como MVP de la jornada. Para el pívot de Tenerife solamente tiene buenas palabras, reconociendo que "Ricardo es un jugador que no nos asombra porque nos tiene acostumbrado a esto. A veces me pongo más contento cuando otro jugador interviene más, como Magdveski, que ha hecho un partidazo en el segundo cuarto. Pero es verdad que él es un clinic continuo, un enorme profesional. Ha podido salir a lo largo del año y se propuso no hacerlo para no dejar al equipo tal y como estaba. Los partidos donde tiene menos acierto le pone el mismo corazón a lo que hace. Es un lujo para todos los que estamos aquí tener en el equipo a Ricardo Guillén", remató Aurioles.