Madrid siempre es un sueño, pero otras veces se convierte en necesidad. No tanto la de ganar, pero sí la de jugar bien. Tras la lesión de Maty Marina en Málaga, el bache de resultados y juego de Álex Ruiz ha sido evidente pese al trabajo incesante del joven y su equipo. Es por eso que afronta Madrid con toda la ilusión del mundo y con otras sensaciones distintas a las del mes de agosto. “Estoy volviendo a entrenar más duro, encontrando mi juego”, afirma Álex, quien debuta el miércoles en Madrid en el segundo turno de la mañana, a eso de las 10:45.
El torneo de Madrid no solo es una oportunidad para recuperar la confianza en sí mismo, sino para probar un nuevo compañero (Capitani en La Nucía; Tamame en Mónaco). Elías Estrella, que fuera verdugo en el Máster de Málaga, será el compañero de Álex Ruiz en el Madrid Open: “Me da la sensación de que Elías es muy buena persona. Además, es físico y potente… Vamos a intentar divertirnos”, cuenta sonriente el alhaurino.
Ambos se enfrentarán a la pareja nº7 del ránking World Pádel Tour, Ramiro Moyano y Maxi Grabiel, convirtiendo el cruce en uno de los partidos más apasionantes de la primera ronda. “Son una pareja muy dura. En realidad, solo esperamos estar a nuestra altura, poder jugar bien y, entonces, si puede ser, ganar el partido”, explica Álex con mucha calma.
Lo más importante, las sensaciones de juego. No hay atajo posible para la victoria, sino el duro camino de entrenar. A Madrid, Estrella y Ruiz llegan con un solo entrenamiento juntos debido a la sucesión de torneos. No importa si el pádel que ambos tienen sale a relucir.