Completada la primera semana del COAC del Carnaval de Cádiz ya cada uno va tomando nota de sus favoritas. Ya en la calle empieza a haber debate sobre pasodobles, presentaciones y cuplets. Y lo más importante, ya nadie se acuerda ahora mismo de entradas y otros debates internos.
Pero ya empieza la ebullición del concurso, y se escucha por la calle, vaya pasodoble del Tino, qué música del Noly, cómo viene este año el cuarteto del Gago y demás etcéteras.
Porque el carnaval se ha convertido en casi una religión para algunos, el Credo de los Peregrinos del tristemente fallecido Juan Carlos Aragón, algunos lo profesan como eso, su religión. Parafraseando a Tino este año, tú mi más febril debilidad.
Agotar las entradas de todas las sesiones de preliminares en apenas unas horas, demuestran que la pasión por el carnaval está en pleno auge. Pero no solo la fase de adultos. En la cantera también se agotaron las entradas en poco tiempo.
Lo que profesa más esta religión, son las colas que se formaron en el baluarte durante el domingo y el lunes, en búsqueda de las entradas. Todo esto sin que se hubiera anunciado nada por parte del ayuntamiento.
Algo más que demuestra que el carnaval es una pasión enorme, es que más de 30000 personas en un mismo momento estaban viendo en directo el canal Youtube durante los primeros días de emisiones. El carnaval interesa y mucho, que no se pierda nunca esa esencia, porque entre todos podemos cargarnos la gallina de los huevos de oro.
Es algo de Cádiz, y por mucho que lleguen agrupaciones de fuera, nadie podrá tener ese compás que tan solo tienen los gaditanos. Pero no dejemos que no se expanda y que todos los aficionados disfruten, vivan y se emocionen con esta bendita pasión.
Carnaval, te odio y te quiero, no se podría resumir mejor. Porque yo creo en la vida eterna de los carnavales y sí, el carnaval es mi más febril debilidad.