Comienza a consumirse la Semana Santa más amarga que se recuerda en Sevilla. Una ciudad que debería estar colapsada de alegría, de gente, de procesiones en la calle. No obstante esta pandemia por el coronavirus ha dejado la metrópoli vacía, en silencio y sin prácticamente gente fuera de sus casas.
En ElDesmarque les ofrecemos las mejores vistas de la ciudad a vista de pájaro, desde un helicóptero de la Policía Nacional, que reflejan a la perfección la soledad y la tristeza de una ciudad que necesita volver a poblar sus calles.