Sevilla se quedó sin Semana Santa y Feria de Abril, dos de los pilares que sustentan la economía de la ciudad. Dos motivos más que ratifican el ejemplo que están dando los sevillanos contra el coronavirus. Más allá del gran esfuerzo de los ciudadanos, sanitarios del Hospital Virgen del Rocío, Macarena y Valme entre otros, un informe de AEMET explica ahora por qué el COVID 19 afecta menos aquí y en Andalucía en general.
El índice de afectación del coronavirus o COVID-19 en España aumenta a menor temperatura promedio, según se desprende de un estudio liderado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
Los resultados preliminares del estudio, publicados este martes por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), comparan el índice de incidencia acumulado en los últimos 14 días definido como número de contagios nuevos diarios por cada 100.000 habitantes con la temperatura promedio correspondiente al mismo período en todas las comunidades autónomas.
La investigación conjunta de la Aemet, dependiente del Miteco, y el ISCIII, adscrito al Ministerio de Ciencia e Innovación, estudia la influencia de variables meteorológicas y de la contaminación atmosférica en la incidencia y propagación de la enfermedad del coronavirus en España. Lo hace con el fin de desarrollar un sistema de vigilancia y contención epidemiológica. Todo eso a nivel estatal basado en la alerta temprana y en la monitorización de dichos factores ambientales.
Al comparar el número de contagios por coronavirus nuevos diarios por cada 100.000 habitantes con la temperatura promedio de ese período los resultados indicaron la existencia de una correlación negativa entre ambos. Es decir, a menor temperatura promedio, mayor incidencia. En consonancia con lo obtenido en otras investigaciones internacionales, y este patrón se repite durante el período analizado. Desde el 26 de marzo hasta el 5 de abril. De ahí uno de los motivos de la relativa baja incidencia en Sevilla (top 6 de menos contagios). De igual forma que en Andalucía.
Según explica el Miteco, investigaciones recientes en relación a la propagación de la COVID-19 y el Virus SAR-COV-2 indican también que la humedad del aire puede incidir en la propagación y transmisión de la enfermedad, principalmente en el sentido de que las altas temperaturas y la alta humedad reducen significativamente la transmisión y propagación del virus.
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Los primeros indicios del estudio de #AEMET con @SaludISCIII apuntan a que en nuestro país el índice de afectación de #covid19 aumenta a menor temperatura promedio, en consonancia con lo obtenido en otras investigaciones internacionales.https://t.co/sgfGmsjf4t pic.twitter.com/Uca5ZdgRlX— AEMET / #QuédateEnCasa (@AEMET_Esp) April 14, 2020
De este modo, la llegada de la temporada primaveral en el hemisferio Norte podría reducir efectivamente la transmisión de la enfermedad COVID-19, subraya el estudio, que analiza asimismo si otro tipo de factores ambientales, como la contaminación atmosférica y en especial las concentraciones de partículas PM10, pueden agravar la enfermedad.
Los resultados -subraya el Ministerio- permitirán investigar con mayor especificidad sobre el impacto de estos factores ambientales en la incidencia y propagación de la enfermedad COVID-19 a través de otras variables en salud, tales como ingresos hospitalarios, ingresos en UCI y mortalidad, mejorando así la identificación de zonas de riesgo en tiempo real a nivel provincial y diseñar estrategias de diagnóstico y prevención para la gestión de medidas de actuación adecuadas desde el ámbito de la salud pública.
Así lo marca el estudio publicado por investigadores de la Escuela Superior de Ingenieros de la Universidad de Sevilla. Si la desescalada comienza antes en las provincias andaluzas al haber menos tasa de contagios, la economía de la comunidad se vería beneficiada. Estos investigadores cifran en 2.880 millones de euros la cantidad que dejaría de perder Andalucía en términos de PIB. Todo esto si se ajustara la cuarentena a las necesidades de cada provincia. Eso sí tomando medidas adicionales para no bajar los niveles de seguridad para la salud pública.
La última actualización de datos sitúa a la provincia de Sevilla con 2.083 positivos por coronavirus, lo que supone 17 nuevos contagios en las últimas 24 horas. Unas cifras muy distintas a las de hace una semana y que advierten la mejoría. Es la cifra más baja de nuevos contagios desde el inicio de la pandemia.
De ellos el total 971 han precisado hospitalización y 129 el ingreso en una UCI. Un único fallecido se ha registrado en el último día y son 178 en total. En cuanto a los curados es de 294, 19 más que el día anterior. Sin duda alguna brindan motivos para la esperanza. No obstante aún hay que seguir manteniendo la calma.