La posibilidad de que la Feria, aplazada en el mes de abril, pueda celebrarse en septiembre cuenta con algunos condicionantes que se deben despejar. El primero y más importante es la evolución de la pandemia del coronavirus. También cuestiones económicas. Dos factores a tener en cuenta, que igualmente podrían suponer la celebración de la fiesta en un formato más reducido.
Según ABC, Juan Espadas, alcalde de Sevilla, ha encargado un informe económico a Fiestas Mayores para despejar algunas de las dudas que plantea la celebración de la Feria en septiembre. El calendario de pago para la edición de 2021, que se tiene que efectuar durante el otoño, supondría una doble carga para el consistorio en ese momento del año.
Una importante apuesta económica que el Ayuntamiento debe valorar con un panorama incierto en cuanto a los ingresos y pagos por la situación derivada de la pandemia del coronavirus. No es la única arista a tener en cuenta. Por ejemplo, también habría que resolver tema sobre las atracciones de la calle del Infierno, a quienes hace unos días se le devolvieron las tasas por valor de cuatro millones de euros y que, por compromisos en otras ferias, podrían no estar disponibles para ofrecer sus servicios en septiembre.
También los materiales de la Feria ya instalados en las casetas también tienen en muchos casos otros destinos en otras celebraciones, por lo que habría que estudiar la viabilidad de que se quedaran montados durante estos meses en el Real de la Feria.
Una serie de situaciones que el Ayuntamiento quiere evaluar para saber si finalmente opta por la celebración de la Feria en septiembre, como tiene en mente, o incluso hacerlo con un formato más reducido. En cualquier caso, lo que apunta a que se mantendrá será el festivo del miércoles 23 de septiembre, que se trasladaría del 29 de abril, fecha fijada inicialmente.
No se han devuelto las tasas a los feriantes. Entres los que me incluyo. Haced una labor de periodismo e iros no solo a una fuente para confirmar las noticias.