Málaga encumbra al club más laureado del fútbol sala nacional: ¡Movistar Inter, campeón!
Movistar Inter volvió a coronarse en su década prodigiosa tras conquistar en Málaga su decimocuarto título de Primera División de fútbol sala, el sexto en los últimos siete años ante un gran Viña Albali Valdepeñas, que ha dignificado el deporte con su afán competitivo y que llegó a empatar a tres en la final. Es el club más laureado del fútbol sala español, pero nunca antes había conquistado seis títulos de Primera División en sólo una década, Movistar Inter lo ha logrado este martes reconquistando el trofeo sobre la pista del Martín Carpena.
Los de Tino Pérez lo han conseguido venciendo la resistencia de un admirable Viña Albali Valdepeñas al que sólo ha privado del triunfo el factor decisivo que, en caso de empate, posee el puesto en la fase regular, gozando de opciones hasta el mismo bocinazo final.
Era Movistar Inter FS el equipo que parecía con más hechuras y experiencia durante los primeros compases de la finalísima, rentabilizando su mejor entrada en el partido con un tanto de Pito a los dos minutos fruto de una acción de estrategia. El tanto espoleaba a los manchegos quienes rápidamente ponían cerco a la portería de Jesús Herrero, quien salvaba las acometidas rivales hasta que un penalti ratificado por el soporte tecnológico y convertido por Chino restablecía la igualada.
Los minutos previos al descanso iban a convertirse acto seguido en los decisivos del encuentro con un Inter que tiraba de eficaciua ante la portería contraria después de haber sufrido unas cuantas amenazas en contra. Las dianas de Borja y Pito en sendas acciones de equipo ponían tierra de por medio en el electrónico.
Sin embargo, al igual que sucedió en el choque de cuartos frente al CA Osasuna Magna, los de Valdepeñas no optaban por la rendición y en un apasionante segundo acto han llevado al límite a un Inter, cargado de faltas, empatando a un minuto de la conclusión y disponiendo de opciones hasta el último aliento del choque. Un sueño oceánico el del debutante Valdepeñas que se quedaba en la orilla. Carlos Ortiz en su last dance como jugador de Inter levantaba el trofeo sobre la pista de Málaga culminando así ocho grandes días de fútbol sala en tierras andaluzas.