El tenista malagueño Alejandro Davidovich se impuso este lunes con dificultad en el Masters 1.000 de Roma al bielorruso Ilya Ivashka en tres sets (6-2, 4-6 y 6-4) y se medirá ahora, en segunda ronda, al canadiense Félix Auger-Aliassime, octavo cabeza de serie del torneo.
Comenzó como un torbellino el malagueño y se llevó la primera manga con un contundente 6-2 en el que impidió que su rival entrase en el partido llevándole al fondo de la pista y moviéndole con golpes precisos y esquinados. Davidovich rompió en tres ocasiones el servicio de su rival, sin mayor complicación, y parecía haber encarrilado el partido al término de este primer set con un Ivashka que se retiró al descanso contrariado.
Pero el bielorruso no se dio por rendido y sacó fuerzas para igualar el juego. El segundo set se convirtió en un intenso intercambio de golpes en el que ambos se desesperaron en algún momento por sus fallos, aunque la balanza cayó de parte del número 50 del ránking, que rompió el primer y el último servicio del español.
Con todo igualado en el envite definitivo, Davidovich sacó su garra, esa que tanto le caracteriza, y se llevó el partido tras otra igualada contienda en la que volvió a ser clave la solidez en el resto del número 29 del mundo, que además quebró tres veces a Ivaskha, la última en el momento clave, con 5-4 en el marcador a su favor.
Ahora, el finalista del Masters 1.000 de Montecarlo se encontrará a Auger-Aliassime en segunda ronda, una de las jóvenes promesas del circuito.