El tenista asturiano Pablo Carreño no pudo terminar su partido de la tercera ronda de Roland Garros contra Benoit Paire, y se vio obligado a retirarse al inicio del cuarto set, cuando el francés dominaba por 6-2, 4-6 y 7-6(1).
Paire, 38 del mundo, que nunca antes se había clasificado para los octavos de Roland Garros, buscará un puesto en cuartos, sus primeros en un grande, contra el vencedor del duelo entre el japonés Kei Nishikori, séptimo favorito, y el serbio Laslo Djere.
Carreño había recuperado su buen tenis en este Roland Garros, donde consiguió su primera victoria desde los octavos de final del Abierto de Australia. Avanzó dos rondas, pero su cuerpo no le permitió seguir una tercera y dijo adiós.
"En el primer punto del juego de desempate sentí un pinchazo que no me ha dejado continuar. He hablado con el fisio y hemos tomado esa decisión", aseguró el asturiano, que señaló que la lesión es en el aductor derecho, mientras que en el Abierto de Estados Unidos del año pasado fue el izquierdo.
El tenista señaló que intentó seguir durante el juego de desempate, pero le molestaba "al sacar y cuando corría a la derecha", por lo que no pudo competir.
Carreño se someterá a una ecografía y en los próximos días se podrá determinar el alcance de la lesión.
El tenista aseguró que estaba "triste" por la lesión, aunque satisfecho de haber jugado bien en París incluso frente a Paire, un tenista que viene haciendo una buena temporada sobre tierra batida, donde ha ganado los torneos de Marrakech, y el de Lyon, la semana pasada.