El Principado de Asturias ya piensa en medidas más contingentes para frenar el avance del COVID-19 en la comunidad. Ante el incremento de casos en la zona oriental del territorio asturiano, el Principado se prepara para endurecer las medidas sanitarias. De hecho, la 'alerta naranja' ya ha sido decretada en cinco concejos.
Es en la zona oriental de Asturias donde se encuentran los puntos más calientes de los contagios. Los concejos señalados por la situación actual son: Llanes, Cangas de Onís, Ribadesella, Cabrales y Parres, quienes duplican la tasa regional de casos en comparación al resto de Asturias. Ante los hechos más recientes, no ha quedado otra salida que determinar la 'alerta naranja' en los concejos mencionados.
Con la intención de frenar la expansión de las zonas más afectadas al resto de la comunidad, Salud Pública ha pedido colaboración a los ayuntamientos de los concejos. Para resolver las cuestiones sobre las nuevas medidas ha intervenido el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño.
🚨Salud declara la alerta naranja en Parres, Cangas de Onís, Cabrales, Ribadesella y Llanes por alto riesgo de transmisión del #coronavirus debido a la aglomeración de residentes y turistas y el inadecuado cumplimiento de las medidas de seguridad
🔎+ info👉🏾https://t.co/pb9WxJ52Ef pic.twitter.com/RiKUIb8gbo— Principado de Asturias (@GobAsturias) August 26, 2020
En esta línea, Rafael Cofiño ha explicado que, además de endurecer las medidas establecidas, se plantearían "intervenciones específicas" y "cierres temporales". Asimismo, se "reevaluarán" las actividades que se llevan a cabo en estos municipios para decidir si "no hay que realizarlas o hay que realizarlas de forma distinta o con un mayor control".
Y no quedan ahí las medidas, sino que el compromiso ciudadano está en evitar las reuniones superiores a diez personas y "agrupaciones indebidas en espacios de ocio". Ahora, Salud Pública trabaja en coordinación con la Delegación del Gobierno en Asturias para evaluar la evolución y reforzar las medidas si fuese necesario.
La intención "no es generar una situación de máxima preocupación, pero sí de alerta", prosiguió Cofiño. La intervención sirvió para concienciar a los ciudadanos asturianos. El número de contagios se acentúa en la zona oriental. Al Principado le toca atajarlo para evitar que llegue en la misma situación de alerta al resto de la comunidad.